El presidente Fernando Lugo decidió someterse a la prueba de ADN para determinar la paternidad de un niño de dos años ante una demanda entablada por una mujer, la tercera que le reclama una filiación por la vía judicial, anunció ayer su abogado.
“El Presidente deja en manos de la justicia la determinación de la fecha y el lugar para realizar la prueba de ADN”, informó su defensor Marcos Fariña a periodistas. Fariña se refería a la querella promovida por Hortensia Damiana Morán por la paternidad de su hijo Juan Pablo.
Procedimiento
La prueba debería hacerse la próxima semana, antes de Navidad, en la casa presidencial, si la contraparte no se opone, agregó. Morán, una ex catequista de la Iglesia Católica de 39 años, dijo que su hijo fue concebido cuando Lugo se lanzó a la política en 2006 y cuando ella ya estaba separada de su marido, que emigró a España. Beningna Leguizamón, una segunda mujer que reclama la paternidad por un hijo de seis años, Lucas Fernando, exige a Lugo que se someta a la prueba de ADN. Lugo apeló el pedido afirmando que como Presidente le corresponde hacerse la prueba en la residencia oficial.
Leguizamón dijo que procreó cuando ella era limpiadora de la Diócesis de San Pedro, donde el actual Presidente ejercía como obispo.