Río de Janeiro enterró ayer a las víctimas del asesino que el jueves mató a 12 niños y adolescentes en una escuela antes de suicidarse, en medio de la congoja y la indignación de un país que busca entender qué motivó este ataque sin precedentes en América Latina.
Una multitud se concentró en el cementerio Murundu, cercano de la zona de Realengo, el suburbio del oeste de Río donde se ubica la escuela primaria en la que ocurrió la matanza, constataron periodistas. Un helicóptero de la Policía Militar arrojó pétalos de rosas desde el cielo sobre la gente cuando se realizaba el primero de los entierros, en un gesto que emocionó a los presentes.
“¿Por qué ella, por qué ella?”, gritaba sin consuelo una abuela que enterraba a su nieta, mientras algunas personas la sostenían para evitar que se derrumbara. Diez niñas y dos varones perdieron la vida cuando Wellington Menezes de Oliveira, de 23 años, un ex alumno de la escuela, ingresó al recinto y les disparó a quemarropa. Otros 11 jóvenes permanecen hospitalizados, cuatro en estado grave.
El ataque ocurrió la mañana del jueves, a la hora de entrada de los estudiantes a la escuela primaria municipal Tasso da Silveira, que permanecerá cerrada por una semana. A medida que las horas pasaron, comenzaron a divulgarse detalles del ataque y del joven agresor.
Evidencias
Dos videos -uno del circuito interno de cámaras de la escuela y otro de un testigo subido al sitio You Tube- muestra escenas de pánico en las que se ve a los adolescentes intentado escapar de su atacante, corriendo desesperados por los corredores de la escuela y saliendo del lugar ensangrentados.
El hombre hizo al menos 60 disparos contra los menores, principalmente a la cara y al pecho, con dos pistolas que fueron presentadas por la Policía. “Según testigos, él usaba las dos pistolas al mismo tiempo”, dijo el director de la División de Homicidios, Felipe Ettore.
Once de los estudiantes murieron en el lugar y otro falleció horas más tarde en un hospital. La sobreviviente Brenda Rocha Tavares, de 13 años y aún hospitalizada por heridas de bala, se enteró ayer de la muerte de su hermana gemela Bianca, según el sitio de noticias G1 de O Globo.