19/04/2024
12:32 AM

Economía de Nicaragua se hunde por la crisis sociopolítica

  • 18 mayo 2019 /

Los sectores de turismo y comercio han sido los más golpeados tras cumplirse un año de enfrentamientos

    Managua, Nicaragua.

    Un año después de que estallara la crisis sociopolítica en Nicaragua, la economía de este país centroamericano, que crecía a un ritmo anual del 4.9 %, se hunde aceleradamente amenazando con empeorar la situación de pobreza de la mitad de los nicaragüenses.

    Mientras el Gobierno y la Alianza opositora permanecen estancados en un diálogo, Nicaragua será el único país de Centroamérica con saldo rojo por segundo año consecutivo y la segunda economía en América Latina y el Caribe que más decrecerá en 2019, superada únicamente por Venezuela, cuyo PIB, según las proyecciones del FMI, se contraerá un 25 %.

    La Comisión Económica para América Latina (Cepal) coincidió con el FMI en que la incertidumbre y la tensión paralizan las decisiones económicas importantes en Nicaragua y previó que el PIB cerrará este año en recesión (-5%).

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    muertos ha dejado un año de crisis en Nicaragua, según la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).

    El Gobierno de Daniel Ortega proyecta un decrecimiento de 1.01 % en 2019, mientras para la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), un centro de pensamiento independiente, estima una contracción de entre el 7.3% y 10.9%.

    Este año, la mitad de los nicaragüenses enfrentará el riesgo de la pobreza si no se resuelve la crisis sociopolítica, de acuerdo con un informe del Funides.

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    Las personas que viven con 1.79 dólares o menos diarios se han incrementado en Nicaragua y la pobreza general pasó de 20.4% en 2017 a un 23.5% el año pasado. En 2019 cerrará entre un 29.9% a 32%, advirtió esa oenegé.

    En caso de extenderse la crisis, un 21% quedarían como pobres generales, otro 21% como pobres vulnerables y un 9% como pobres extremos. Nicaragua también perdió 157,923 empleos formales el año pasado como consecuencia de la crisis, y este año Funides prevé que se pierda una cantidad igual, y el Gobierno espera una reducción de otros 65,026.

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    presos políticos busca liberar la oposición en las negociaciones con el Gobierno.

    En 2018, las principales actividades económicas afectadas por la crisis fueron, en ese orden, hoteles y restaurantes (-20.2 %), construcción (-15.7%), comercio (-11.4%), pecuario (-5.4%), intermediación financiera (5.4%), silvicultura (-4.2%), y transporte (-3.5%), indicó el titular del Banco Central, Ovidio Reyes, al presentar un informe anual ante el pleno parlamentario. El turismo ha sido uno de los sectores más golpeados. La Cámara de Turismo estima que el país dejó de recibir 600,000 visitantes extranjeros, dejando pérdidas de 400 millones de dólares.

    También las importaciones cayeron un 14%, el consumo privado un 4.8%, el gasto público un 2.8%, y las exportaciones 2.6%.

    3 Claves de la crisis en Managua
    1. Represión y violencia
    La crisis sociopolítica que Nicaragua vive desde abril pasado ha dejado cientos de muertos, desaparecidos y detenidos; mientras decenas de miles se exiliaron en los países vecinos por la persecución del régimen, según organismos humanitarios.
    2. Crímenes de Ortega
    La CIDH afirmó que el Gobierno de Nicaragua ha podido incurrir en crímenes “de lesa humanidad” durante la crisis, debida a la feroz represión contra las marchas opositoras. La OEA impulsa un debate para aplicar la carta demócratica al país centroamericano.
    3. Diálogo empantanado
    Las negociaciones entre el Gobierno y la oposición continúan estancadas a un año de la crisis sin llegar a un acuerdo ante la exigencia de Ortega para que EEUU levante las sanciones y el pedido de los opositores de la liberación total de los presos políticos.

    Decisivo.

    El próximo junio será un mes clave para el futuro inmediato del país vecino: el día 18 vence el plazo que el Gobierno de Daniel Ortega acordó con la oposición para liberar a todos los manifestantes antigubernamentales detenidos en el marco de la crisis que estalló en abril de 2018 y que ha dejado cientos de muertos.

    Dos días después, el Departamento de Estado de EUA rendirá un informe ante su Congreso sobre la situación del país centroamericano dentro de la Ley de Derechos Humanos y Anticorrupción de Nicaragua, conocida como Nica Act, que estipula restricciones a los préstamos otorgados a Managua y sanciones a los funcionarios que participaron en actos de corrupción y violaciones a los derechos humanos de los nicaragüenses.

    Carta Democrática.

    Y la cereza del pastel será entre el 26 y 28 de junio en la ciudad colombiana de Medellín, adonde la Organización de Estados Americanos (OEA) celebrará su 49 Asamblea General y eventualmente evaluará la aplicación de la Carta Democrática a Nicaragua, lo que podría culminar con su suspensión del organismo continental.

    Para el escritor nicaragüense Sergio Ramírez, el Gobierno de Ortega ya no puede jugar a ganar tiempo porque cada día que pasa se le cierran los espacios. El Ejecutivo tiene que saber que no le queda más camino que el cumplimiento de los acuerdos relativos a la liberación de los “reos políticos” y el restablecimiento de derechos y garantías ciudadanas, dijo a Acan-Efe Ramírez, quien fue vicepresidente durante el primer régimen sandinista (1979-1990) y ahora es un crítico de Ortega.

    “Los días de Daniel Ortega están contados y el pueblo nicaragüense pronto será libre”, John Bolton, asesor de seguridad EEUU.

    Para el también Premio Cervantes 2017, la crisis nicaragüense tiene que resolverse por medio de la negociación, “porque no hay otro camino”; de lo contrario, alertó, la crisis será más profunda y la “simple represión” que ejerce el Ejecutivo sobre sus opositores no resolverá el problema.

    Para el sociólogo y analista político Óscar René Vargas, el tiempo político no corre a favor del “régimen Ortega-Murillo, que solo se puede sostener por la represión indiscriminada”.

    Auguró nuevas sanciones al círculo íntimo de Ortega, sobre todo si Estados Unidos y en menor medida la Unión Europea (UE) consideran que no hay avances en la negociación para superar la crisis.

    Sin aliados.

    Ortega nombró al vicecanciller Valdrack Jaentschke como su ministro asesor para las relaciones internacionales y con los países del Caribe.

    Uno de los objetivos del mandatario con ese nombramiento es dar la “batalla” en el seno de la OEA para evitar los 24 votos que se requieren para la expulsión de Nicaragua de ese organismo, según diversos analistas.

    “Es vergonzoso o indignante que (los opositores) entreguen su pueblo a losimperialistas”, dijo Daniel Ortega, presidente de Nicaragua.

    Para la 49 Asamblea General de la OEA, el Gobierno de Ortega ya no contará con el apoyo de Venezuela, cuyo asiento en ese organismo ahora lo ocupa un delegado del jefe del Parlamento, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, ni el de El Salvador, que para esa fecha será gobernada por Nayib Bukele, quien ha guardado distancia de los sandinistas.

    Para el excanciller nicaragüense Francisco Aguirre Sacasa, existen altas probabilidades de que se suspenda a Nicaragua de la OEA; pero si no se consiguen los votos, será un fracaso tanto para la oposición como para Estados Unidos y su diplomacia, que ha manejado con celeridad ese asunto.

    Sin visos de solución a la crisis, con un Gobierno divorciado con el sector privado, sin la ayuda venezolana, y con la cooperación internacional congelada, Nicaragua, el segundo país más empobrecido de América y desgarrado por décadas de guerra civil, conflictos y desastres naturales, se encamina a sus peores años económicos desde la década de los años 80, cuando también gobernó Ortega.