El Consejo Supremo Electoral, CSE, aseguró ayer que concluyó los preparativos para los comicios en que el domingo se elegirán autoridades municipales, en un proceso salpicado de denuncias de violencia partidista y el temor de que la ausencia de observadores independientes propicie un fraude.
El presidente del Consejo Supremo Electoral, Roberto Rivas, dijo en conferencia de prensa que 'todo está listo' para las votaciones. El jefe del Ejército, general Omar Halleslevens, quien recorrió con Rivas los centros de cómputo de la capital, dijo en la misma rueda de prensa que 'todo está funcionando a cabalidad con orden y limpieza y fluidez en la información'.
El material electoral fue transportado por las fuerzas militares a los 4 mil 296 centros de votación que funcionarán en el país, sostuvo. Casi cuatro millones de nicaragüenses están convocados a las urnas para elegir a los nuevos alcaldes en medio de una gran polarización política, que se ha convertido en un plebiscito sobre la gestión del presidente Daniel Ortega.
Máxima seguridad
Ocho mil efectivos garantizarán la seguridad de los comicios, en los que se disputan 146 alcaldías, vicealcaldías y la integración de concejos.
El opositor Partido Liberal Constitucionalista, PLC, que ha denunciado agresiones contra sus simpatizantes de parte de partidarios del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional, Fsln, lamentó que el CSE no acreditó a miles de observadores del organismo no gubernamental local Ética y Transparencia.
El PLC puso en duda la idoneidad de los observadores del denominado Consejo de Expertos Electorales de América Latina, Ceela. AFP