Alemania advirtió hoy sobre el peligro de una retirada precipitada de Afganistán y aseguró que los soldados germanos continuarán estando presentes en el país más allá de 2014, cuando está previsto el repliegue de las últimas tropas internacionales comandadas por la OTAN.
'Una reducción exagerada del contingente desde un punto de vista simbólico queda tan descartado como una renuncia precipitada a las capacidades militares', declaró el titular de Defensa germano, el cristianodemócrata Thomas de Maizière, durante una conferencia sobre política de seguridad.
El ministro señaló que no se pueden poner en juego los éxitos cosechados hasta el momento y llamó, por el contrario, a una 'paciencia estratégica'.
'Tendremos soldados en Afganistán durante mucho tiempo, también después de 2014', subrayó.
Actualmente, Alemania cuenta con cerca de 5.000 soldados estacionados en Afganistán, por detrás de Estados Unidos y Reino Unido, en una misión que se prolonga ya desde hace casi diez años.
En los próximos dos meses está previsto que se decida la fecha para el inicio de la retirada de las tropas de la Bundeswehr.
Parte del ejército alemán ha acogido con reservas la propuesta del titular de Asuntos Exteriores germano, Guido Westerwelle, que insiste en que el repliegue comience ya este año.
El titular de Defensa tampoco especificó cuántos soldados regresarán a Alemania en esta primera fase de la retirada.
Por otra parte, De Maizière da por supuesto un aumento de solicitudes de otros países para la participación de Alemania en otras misiones internacionales: 'Nuestros socios en el mundo nos ven hace tiempo como un socio adulto, con igualdad de derechos y responsabilidades'
En este sentido, el titular de Defensa señaló que Berlín asumirá responsabilidades 'en una mayor medida', aunque puntualizó que toda solicitud 'será estudiada minuciosamente'.
La retirada de las tropas internacionales del país asiático para 2014 centrará además la conferencia internacional de Afganistán prevista para principios de diciembre en Bonn, la antigua capital federal alemana.
Según un reciente estudio del Instituto Alemán de Estudios Económicos (DIW), la misión de las tropas alemanas en Afganistán ha costado en diez años 17.000 millones de euros, el triple de lo presupuestado inicialmente por el Gobierno federal.