La iniciativa presentada por el diputado de Libre (Libertad y Refundación) Ramón Barrios con el propósito de eliminar la atribución de las Fuerzas Armadas de garantizar la alternabilidad presidencial mediante la reforma al artículo 272 constitucional, ha provocado reacciones de descontento y ha encendido las alarmas en diversos sectores.
Ante la inminente amenaza a la democracia, varios sectores han rechazado la intención del oficialismo de violar este precepto constitucional. En su mayoría, condenaron la acción, mientras que otros la catalogaron como un globo sonda.
“Hay personas que les gusta lanzar globos sonda ante la opinión pública, pero todo globo sonda tiene un propósito y es evaluar cuál es el pensamiento de una situación específica”, señaló el diputado del Partido Salvador de Honduras (PSH), Carlos Umaña.
Añadió que “cuando ve a un abogado constitucionalista de los más destacados de Libre, cuando ve a un diputado intentando quitar la personería jurídica a partidos involucrados en problemas legales, es porque algo está ocurriendo; no es una coincidencia, sino un intento de evaluar la reacción del pueblo hondureño”.
Según la oposición política, la intención detrás de la iniciativa presentada por el oficialismo es buscar la concentración de poder para perpetuarse en el gobierno.
“El partido Libre busca perpetuarse en el poder mediante el control de los poderes del estado y la desaparición de los partidos políticos”, aseguró la diputada nacionalista María Antonieta Mejía.
El abogado constitucionalista Juan Carlos Barrientos afirmó: “Ramón Barrios está pretendiendo ganarse el favor de la Presidencia de la República para intentar crear una intención de reelección”.
Romeo Vásquez Velásquez, general retirado de las FFAA, argumentó que “lo que está haciendo este diputado (Ramón Barrios) sigue una estrategia para quedarse en el poder; ellos tienen un plan”.
La ola de críticas y cuestionamientos al parlamentario surgió después de presentar una iniciativa de reforma al texto constitucional, eliminando la función de las Fuerzas Armadas de velar por el cumplimiento de la alternabilidad presidencial, al considerarla una atribución meramente política y civil.
El artículo 272 Constitucional establece que “se instruye para defender la integridad territorial y la soberanía de la República, mantener la paz, el imperio de la Constitución, los principios de libre sufragio y la alternabilidad en el ejercicio de la Presidencia de la República”.
