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Migrantes dramatizan el horror de la masacre de San Fernando, Tamaulipas

  • 24 agosto 2020 /

En el Albergue La 72, en Tenosique, Tabasco, reviven la pesadilla que vivieron los masacrados hace 10 años.

Tabasco, México.

Para conmemorar los 10 años del asesinato de 72 migrantes, el Albergue La 72, en Tenosique, Tabasco, realizó una dramatización de la masacre ocurrida el 23 de agosto de 2010 en San Fernando, Tamapulipas.

La jornada incluyó una ceremonia ecuménica y reflexión en memoria de los 72 migrantes que fueron presas del grupo criminal Los Zetas.

“Esta es una manera de rendir un homenaje a los migrantes, cuyo crimen sigue impune. Sus muertes no se olvidan y esperamos que un día se haga justicia”, expresó fray Gabriel Romero Alamilla, director del albergue. Migrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala realizaron la representación personificando a los fallecidos, como también a los miembros del crimen organizado que los asesinaron en un rancho de San Fernando.

Papa Francisco los recuerda. En la homilía de ayer, el papa Francisco tuvo un recuerdo para los 72 migrantes asesinados hace 10 años en la masacre de San Fernando, en el estado mexicano de Tamaulipas, adonde dijo que cayeron “en el viaje de la esperanza”.

“Eran personas de distintos países que solo buscaban una vida mejor”. El Señor nos pedirá cuentas de todos los migrantes que han caído en el viaje de la esperanza” y que “han sido víctimas de la cultura del descarte”, señaló el papa Francisco.

Recordó que este 24 de agosto se celebra el décimo aniversario de esta masacre mientras los familiares de las víctimas todavía hoy siguen pidiendo justicia y la verdad sobre lo que ocurrió.

El mensaje lo dio el pontífice después del rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro, en Roma. Esta masacre fue cometida por Los Zetas donde fueron secuestrados y asesinados 58 hombres y 14 mujeres, donde fueron identificados 24 hondureños, 14 salvadoreños, 13 guatemaltecos, cinco ecuatorianos, el resto no se identificó.

Desde entonces, familiares de los fallecidos como defensores de derechos humanos y organizaciones han reclamado justicia a las autoridades, pero la información todavía es muy escasa.