Éxitos de cine y TV, los libros más vendidos en Honduras

San Pedro Sula, Honduras

Honduras está viviendo un auge en la pasión por la lectura y en la generación de nuevos autores, por lo que expertos aseguran que cada vez hay más lectores y escritores hondureños, lo que califican positivo para el presente y futuro del país.

Sin embargo, los principales exponentes del género literario del país lamentan que debido a la falta de apoyo y los problemas económicos, para los autores hondureños sea una “odisea” publicar un libro.

“La población ha aumentado mucho y ahora tenemos más poetas y más escritores que nunca en la historia, pero proporcionalmente no estamos publicando el número de libros que se debería porque no hay una política para apoyar esto tan importante que está relacionado con el arte y la cultura”, expresó Juan Ramón Martínez, director de la Academia Hondureña de la Lengua.

El escritor detalló parte de la serie de problemas con los que se encuentran los autores nacionales que aspiran a imprimir sus obras para darlas a conocer.

“Publicar un libro es una odisea en Honduras, hay que usar su propio dinero convencido de que no lo recuperará. En otros países buscan a los autores, pero aquí los autores andan pidiendo favores para publicar un libro. Eso tiene que cambiar”, expresó.

Fundamental

Martínez consideró que es vital que se fomente la lectura en los niños y que se brinde un apoyo concreto a los escritores hondureños, tanto a los nuevos talentos como a la generación más experimentada.

“No hay espacio para los nuevos autores, muchos se pierden sin jamás publicar nada porque no tienen los recursos para hacerlo. Se tienen que promover más libros para los niños y jóvenes. Además, está mal que haya tantos impuestos para los escritores que quieran dar a conocer su obra”, cuestionó.

El director de la Academia Hondureña de la Lengua aconsejó a los docentes que no hagan sentir a los estudiantes que al leer un libro están siendo castigados o que es una imposición, pues esto alejará a los menores de la lectura.

“Los profesores tienen que animar a los niños y jóvenes a leer, pero con gusto, que tomen el aprecio por la lectura. Para empezar a desarrollarse lo primero que deben hacer los países es fomentar la cultura”, afirmó Martínez.

El papel vive

Aunque hace unos años los libros digitales se volvieron una moda entre jóvenes y adultos, ahora la lectura de los libros en físico ha retomado fuerza en el territorio hondureño.

“La gente ha retomado el gusto por leer los libros en sus versiones en papel. Muchos dicen que nunca es lo mismo ver una obra en un celular, una computadora o la tableta. Según su edad, gustos o intereses, las personas vienen y escogen sus libros”, manifestó Sofía López, administradora de la librería sampedrana Metronova, ubicada en Galerías del Valle.

López explicó que no se puede encasillar al lector hondureño en un solo tipo de libros, pues hay demanda tanto para comprar obras de ciencia ficción, novelas románticas, libros de misterio o suspenso, así como hay muchos compradores de libros de economía, historia, mitología griega, entre otras publicaciones.

“La variedad de géneros que interesan a los hondureños es extremadamente amplia”, expresó.

Agregó que los libros más vendidos en los últimos años están siendo los que han sido adaptados al cine o la televisión, como fue el caso de “Juego de Tronos”, adaptado a la televisión, o “Los Juegos del Hambre” y “50 Sombras de Grey”, obras llevadas al cine recientemente.

“Un ejemplo de esto es que el libro más vendido ahora es Ready Player One, una obra de la que se hizo película que se estrenó este año en Honduras”, contó López.

Ready Player One es una novela de ciencia ficción escrita por Ernest Cline, escritor estadounidense.

La obra es de 2011, pero tras el estreno de la película las ventas del libro han tenido un repunte impresionante en el país. Otra demanda cada vez más grande entre los hondureños es la compra de libros en inglés.

“La cantidad de compradores que buscan libros en su idioma original es tan grande que en Metro, esta librería, tuvimos que dedicar una sección completa exclusivamente para obras en inglés”, declaró la administradora de Metronova.

López dio a conocer que aunque la mayor parte de las ventas son de obras de autores extranjeros, siempre hay clientes que buscan las publicaciones hondureñas, por lo que se dedica también un espacio solo para autores del país.

“Por lo general estas obras hondureñas las busca el cliente que tiene entre 30 y 40 años en adelante”, dijo.

Contradicciones

A pesar de que muchos hondureños están despertando su amor por la lectura, expertos literarios del país cuestionan que no se abren las puertas para que se lea más la obra de escritores nacionales. Según análisis de críticos literarios y escritores, “la literatura se ha diversificado y arrastra una gran calidad”, y agregan que ahora los narradores ya no solo abordan temas sociales, sino que también incursionan en la creación de otros personajes en diferentes situaciones y géneros.

Expertos consideran que “la poca identidad nacional” es uno de los motivos por el que los lectores hondureños están tan marcadamente inclinados a leer más obras extranjeras que publicaciones del país.

Los escritores nacionales critican que la mayoría de autores hondureños se ven obligados a costear con su propio dinero o buscar financiamiento para hacer realidad el sueño de publicar sus obras.

“Honduras es un país donde la cultura no tiene un papel preponderante. Los creadores de cultura están relegados. Publicar en Honduras no es fácil. No hay dinero para publicar libros hondureños. Hay pocas editoriales. Las ofertas de publicación son muy escasas. Va uno a una imprenta, paga para que le publiquen y uno mismo anda vendiendo los libros en la calle”, reveló Nery Gaitán, escritor hondureño.