La candidata oficialista Laura Chinchilla obtenía el 48,66% de los votos en las presidenciales de Costa Rica de este domingo tras el escrutinio del 11,35% de las juntas receptoras, por delante del opositor Ottón Solís (22,46%), informó el Tribunal Supremo de Elecciones, TSE.
Esta cifra supera el 40% necesario para que un candidato gane la elección en primera ronda, mientras los dos principales rivales de Chinchilla apenas superan el 20% de los votos, según los datos del primer informe del TSE.
Ottón Solís, del centro-izquierdista Partido Acción Ciudadana (PAC) lleva el 22,4% de los votos, mientras Otto Guevara, del derechista Movimiento Libertario, suma un 21,3% de los sufragios.
El porcentaje restante se divide entre otros seis candidatos presidenciales de partidos minoritarios. El presidente del TSE, Luis Antonio Sobrado, anunció que los primeros resultados comprenden 751 mesas de un total 6.617.
'El Tribunal Supremo de Elecciones está en condiciones de reconocer con orgullo que los costarricenses hemos protagonizado un ejercicio democrático ejemplar. Todas las juntas se abrieron y atendieron con eficiencia a los ciudadanos que abarrotaron los centros de votación', declaró Sobrado.
Sobrado evitó dar un ganador por el momento y llamó a la cautela a los ciudadanos para que tomen los resultados con calma, recordando que se trata del primer informe.
'Hoy ganó la democracia', dijo el presidente del TSE, quien hizo un llamado a los candidatos para que se lleve a cabo una 'construcción de consensos' en los que 'todos los costarricenses contribuyamos a un mejor mañana'.
Un total de 2,8 millones de costarricenses estaban llamados a las urnas hoy en Costa Rica para elegir al presidente y 57 diputados para un periodo de cuatro años, y según los primeras mesas escrutadas por el TSE el abstencionismo se ubica en el 33,4 por ciento.
Los costarricenses vivieron el día como una fiesta y miles se lanzaron a las calles de la capital y de otras ciudades con banderas y globos para apoyar al candidato de su predilección.
Las arterias principales de la ciudad estaban atascadas de vehículos que a golpe de bocina más parecían celebrar el triunfo de la selección en un mundial de fútbol que una jornada electoral.
El presidente saliente, Oscar Arias, definió los comicios como 'una fiesta multicolor en la que cada cual vota de acuerdo con su conciencia'.
'Lo importante es que al final todos quedemos satisfechos con el resultado', dijo a la prensa tras emitir su voto en la Escuela Carlos Sanabria Mora, en Pavas, un barrio de las afueras de San José.
TSE, dará a conocer los primeros resultados a partir de las 20H00 locales (02H00 GMT del lunes), con aproximadamente el 10% de las mesas escrutadas.
En una Centroamérica con países con altas tasas de crímenes y sacudida por una crisis política en Honduras, denuncias de fraude electoral en Nicaragua y acusaciones, falsas, de que el presidente de Guatemala ordenó un asesinato, los comicios de Costa Rica son vistos como ejemplares por unos 200 observadores internacionales que los supervisan.
'Es un proceso electoral bastante sólido, con un comportamiento cívico ejemplar', declaró a la AFP la jefa de la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), la colombiana María Emma Mejía.
La inseguridad y la economía centraron la campaña, pero no se esperan grandes cambios en el 'Estado de Bienestar' que impera desde la guerra civil de 1948 (tras la cual fue abolido el Ejército), en el país más próspero de América Central.
El mayor temor es que haya una alta abstención, que en los últimos cuatro comicios ha superado el 30%, pues el sufragio no es obligatorio.
Más de 2,8 millones de electores estaban convocados a votar para renovar además a los 57 miembros del Congreso y los regidores municipales.
Los tres candidatos principales sufragaron en la mañana luego de acudir a misa, en un país donde el catolicismo sigue siendo la religión oficial y donde los comicios no son custodiados por militares.
Chinchilla y Guevara votaron en la capital y Solís en la ciudad sureña de San Isidro del General o Pérez Zeledón. El Partido Liberación Nacional (PLN) de Arias y Chinchilla, la fuerza dominante desde 1948, es nominalmente socialdemócrata pero tildado de centroderecha por disidentes que se marginaron de él.
Entre ellos, se encuentra Solís, ex ministro del primer gobierno de Arias (1986-1990) y actual líder del Partido de Acción Ciudadana (PAC), la principal fuerza opositora, que aspira por tercera vez a la presidencia.
Otro tanto le ocurre a Guevara, líder del Movimiento Libertario (ML, derecha), un pequeño partido con seis diputados en la actual Asamblea, que también se ha postulado tres veces a la presidencia.
Candidatos emitieron su voto en una jornada de calma
Los principales candidatos a la Presidencia de Costa Rica,Laura Chinchilla, del Partido Liberación Nacional, Ottón Solís, del Partido Acción Ciudadana, y Otto Guevara, del Movimiento Libertario, emitieron hoy su voto en los comicios que según el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) transcurren en calma.
Solís votó en su pueblo natal Pérez Zeledón, en la zona sur del país, y se mostró seguro de que el pueblo costarricense le 'va dar una victoria' porque, dijo, 'sabe que podemos arreglar los problemas y hemos planteado propuesta seria'.
El candidato del PAC, centroizquierda, añadió que 'no es cierto que sea imposible eliminar la corrupción, la pobreza y la inseguridad'.
Por su parte, Guevara votó en el colegio Julio Fonseca de la localidad de La Uruca, en la capital, ante una multitud de medios de comunicación.
El candidato del derechista Movimiento Libertario instó a los costarricenses a salir a votar porque 'es un privilegio del sistema democrático costarricense'.
Además, reiteró su discurso de 'hacer el cambio' y pidió a los electores que lo elijan para 'liderar las transformaciones que Costa Rica necesita en 4 años con más seguridad, más y mejores empleos y una mejor calidad de la educación y salud'.
La candidata favorita en los sondeos, Laura Chinchilla, del oficial Partido Liberación Nacional (PLN), también emitió su voto una escuela de la comunidad de Desamparados, en el sur de San José, donde fue recibida por una multitud de simpatizantes y medios de comunicación que dificultaron su movilidad hacia la urna.
'Siento mucha ilusión. Se han desbordado las expectativas de cariño y estoy muy agradecida con el pueblo de Desamparados', declaró la candidata, quien busca convertirse en la primera mujer que llega a la Presidencia en la historia de Costa Rica.
Chinchilla hizo un llamado a los electores para que salgan a votar y 'no dejen plantada a la patria y democracia' y se mostró confiada en el triunfo.
Otros seis candidatos de partidos minoritarios también aspiran a la Presidencia, pero cuentan con una menor intención de votos.
El presidente del Tribunal Supremo de Elecciones, Luis Antonio Sobrado, aseguró en una conferencia de prensa que 'todas las mesas están abiertas', por lo que 'todo está preparado para recibir el voto de los costarricenses que son los protagonistas en la fiesta mayor de la democracia'.
Agregó: 'el país está en calma, en entera tranquilidad y estamos seguros que continuará así durante el día'. Poco más de 2,8 millones de costarricenses están llamados a las urnas para elegir al presidente y 57 diputados a la Asamblea Legislativa para un periodo de cuatro años.
Otto Guevara
Después de dos postulaciones presidenciales que pasaron casi desapercibidas, Otto Guevara, un abogado de 49 años, muestra orgulloso sus canas pues cree que reflejan la madurez con la cual se cree capaz de acabar con la dominación política de los Arias.
Y es que no duda en acusar al presidente Óscar Arias y su hermano Rodrigo, ministro de Presidencia, de imponer intereses personales en la labor del gobierno.
“No calificaría esta administración de una dictadura pero sí ha ejercido una concentración de poder que va erosionando la democracia”, dijo el candidato durante un encuentro con periodistas.
En sus inicios políticos perteneció al partido Unidad Social Cristiana pero sus diferencias ideológicas lo llevaron a buscar casa aparte y en 1994 fue cofundador del Movimiento Libertario, ML, del que fue diputado entre 1998-2002.
En las elecciones del 2006 consiguió apenas el 8.48% de los votos, pues sus propuestas radicales, como la de eliminar la cotización obligatoria a la Caja del Seguro Social, no atrajeron muchos electores. En la actual campaña promovió una imagen y un discurso más moderado y le funcionó pues se halla en el segundo lugar de las preferencias. En enero registró un 30.4% de intención de voto pero cayó más de siete puntos en el último sondeo obtuvo un 22.9%.
“Hemos acumulado más experiencia, hemos hecho ajustes en la oferta programática con una conexión a las demandas de la ciudadanía; por ejemplo, prometiendo mano dura con la inseguridad y es un mensaje diferente y ha logrado atraer más gente”, comentó Guevara.
Guevara es divorciado, padre de tres hijos y durante sus estudios universitarios recibió una beca para sacar una maestría en la Universidad de Harvard. También es empresario y profesor universitario.
Consciente de que sólo con su partido no tendría la estructura para dirigir el país, Guevara lanzó una invitación a sus rivales. “Mi gobierno será uno de unidad nacional, es lo que buscamos”.
Laura Chinchilla
Laura Chinchilla nunca soñó con ser presidenta ni con la posibilidad que su nombre ingrese a los libros de historia como la primera mujer en alcanzar un cargo tradicionalmente exclusivo para hombres, si gana las elecciones de hoy.
“Para mí es motivo de mucho orgullo y satisfacción el hecho de que, siendo mujer, Costa Rica me esté reconociendo las características de liderazgo, porque es algo que habla bien de Costa Rica en el sentido de que se están superando las distinciones de género y lo que se valora es la capacidad para llevar a buen puerto a nuestro país”, expresó Chinchilla.
A sus 50 años, esta politóloga cargó con el lema de “firme y honesta” durante toda la campaña. Sus adversarios encontraron problemas para hallar puntos negros en su historial, pero criticaron su cercanía con el mandatario Óscar Arias y advirtieron que Chinchilla es una marioneta para garantizar la continuidad del partido Liberación Nacional en el poder.
Vestida de forma sencilla pero elegante, esta mujer de rasgos fuertes contrasta su baja estatura con voz y palabras decididas. Afirma que su única lealtad “será para el pueblo costarricense” y enfatiza que “lo que sigue será mi gobierno, no el de Óscar Arias”.
Casada en segundas nupcias con el abogado español José María Rico, Chinchilla se reconoce católica y por sus creencias no está de acuerdo con temas como el aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero dice respetar la diversidad de opiniones.
Fue la primera ministra de Seguridad que tuvo el país durante la administración 1994-1998 y gran parte de su planteamiento se basa en la lucha contra la delincuencia y el narcotráfico, considerados por un 45% de la población como el principal problema del país de acuerdo a una encuesta de enero de la firma Unimer.
Entre sus planes está crear un Comisionado Nacional Antidrogas, duplicará el presupuesto de seguridad y no tuvo empacho en calificar esos problemas como “una gravísima amenaza que se cierne sobre todo Centroamérica”.
Ottón Solís
La tercera es la vencida para el candidato del partido Acción Ciudadana, PAC, Ottón Solís, confiado en ganar las elecciones presidenciales.
“Estamos así” de cerquita, decía en uno de sus últimos anuncios televisivos. Y es que Solís, un desertor del partido Liberación Nacional, estuvo a punto de ganarle a su ex mentor Óscar Arias en los comicios del 2006, cuando quedó a menos de 20 mil votos.
En el 2002 obtuvo 26% de los votos. Apenas dos años antes de esa elección había levantado al PAC, una agrupación que intenta romper la hegemonía de los partidos tradicionales para acabar los favoritismos de las autoridades hacia los que más ricos y evitar la corrupción, una palabra habitual en su discurso.
“Busco una Costa Rica de oportunidades y un gobierno ético, que respete la institucionalidad de la democracia”, aseveró el economista de 55 años.
Resalta que las tres campañas que lleva le han dejado “muchos aprendizajes, uno ha leído y escuchado más, conoce más comunidades y problemas y estudiado más soluciones... soy ahora una persona con más conocimiento”.
No obstante, discusiones internas en el PAC y la demanda para realizar una elección primaria provocó que el partido arrancara con debilidad la faena electoral, algo que a criterio de analistas se reflejó en las encuestas.
El año pasado datos de la firma Unimer mantenían a Solís cerca del 15% en la intención de voto. En enero cayó a su punto más bajo (13.7 pero a cuatro días de las elecciones la última encuesta divulgada lo colocó con 19.9%, acechando sobre todo a Otto Guevara del Movimiento Libertario, que le supera con un 22.9%.
Las encuestas “no son el indicador de un resultado electoral. ¡Cómo es que hace cuatro años nos daban una derrota por no sé cuántos puntos y al final estuvimos muy, muy cerca de ganar”, expresó Solís, quien es oriundo de Pérez Zeledón, una región del sur del país, y casado desde hace 15 años con la abogada Shirley Sánchez y madre de sus tres hijas: Victoria, Elena e Isabel.