La alegría de llegar a su destino se transformó en gritos, lágrimas, desesperación e incertidumbre. Los sobrevivientes del vuelo TA-390 dan gracias a Dios de poder contar su historia.
Blasina Salazar, a quien en Tegucigalpa esperaban su esposo y sus hijos, fue la primera pasajera en salir de la aeronave. Salazar narra los momentos de angustia que vivió.
'El avión venía cabal. Ya había dado una vuelta de al menos 15 minutos porque había una nube sobre el aeropuerto y dijo el capitán que no podía aterrizar. Cuando ya logró aterrizar, la pista resultó muy pequeña y se le terminó. Por más que intentó detener el avión, los frenos no le agarraron y nos accidentamos', describe.
El primer intento fallido de aterrizaje de la aeronave puso muy inquietos a los pasajeros. 'Las aeromozas sólo dijeron que se trataba de una nube que obstaculizaba el aterrizaje, pero en el segundo intento se sintió un estruendo como si el avión se hubiera caído. Luego todo mundo comenzó a gritar. Eso fue aterrador y realmente no recuerdo si se activaron las alarmas', continuó.
Cuando el avión se estrelló contra el pavimento, cayéndole encima a tres vehículos, Blasina recuerda, poseída aún por el pánico, que lo primero que se le vino a la mente fue abrir la compuerta de emergencia y salir corriendo de la aeronave.
'Fueron momentos de terror. Perdí todo lo que traía, cosas de valor en mi cartera, pero eso no importa. La vida vale más. Gracias a Dios estoy con mi familia, que es lo más importante'. Blasina sólo recibió un leve espasmo en la columna.
Otro relato
El avión aterrizó 'muy a mitad de la pista', según el relato de uno de los pasajeros de la aeronave.
El oficial del programa de ambiente y gestión de riesgo del Pnud, Juan Ferrando, contó a Proceso Digital que el vuelo fue normal, y que al llegar a Tegucigalpa se hizo una primera aproximación a la pista del aeropuerto, pero debido a las condiciones del tiempo no pudo concluir la maniobra de aterrizaje, por lo que volvió a alzar el vuelo.
En la segunda ocasión, añadió, 'el avión tocó pista y la gente empezó a aplaudir y yo le decía a la persona que venía a mi lado si ya se terminó la pista. Efectivamente, como ya conozco el aeropuerto y lo venía monitoreando, me di cuenta de que nos íbamos a ir de la pista.
De lo que no me di cuenta fue que el porrazo iba a ser tan grande. Entonces allí seguimos de largo. Aparentemente, el avión cayó sobre un par de carros. Sólo alcancé a ver una paila que me parece que es tipo una Nissan Frontier negra y el avión se partió en dos, quedó bastante entero. Yo venía en una fila de atrás, en la fila 21.
La gente se empezó a levantar, y como vi que había humo, dije 'vámonos, vámonos, vámonos', y allí uno de los muchachos abrió una de las puertas, y dijo 'no, bloqueada, bloqueada' porque había humo, y entonces abrió la del otro costado, las puertas de atrás, y allí salimos'.
'Lo primero que hice fue salir del avión. Algunos heridos salieron solos, caminando, y a mucha gente herida la tuvieron que sacar. Vi que había gente recostada en el piso, pero no sé si era gente que estaba esperando la ambulancia o no sé.
Lo que pasa es que eso inmediatamente se llenó de gente'. Ferrando dijo: 'Fue un vuelo normal. No tuvo ningún problema en ningún momento, sólo al momento del aterrizaje cuando agarró muy entrada la pista y no logró frenar'.
También contó que inmediatamente después del accidente 'se empezó a meter gente a sacar cosas. Sí tardaron mucho los bomberos en llegar. Después todos los pasajeros nos confundimos entre los curiosos'.
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'Fue un error de piloto',
dice ex ministro de Economía
El accidente del avión fue provocado por un 'error del piloto', aseveró ayer el ex ministro de Economía y Comercio, Norman García, uno de los sobrevivientes de la tragedia.
García, en una entrevista a la emisora HRN, manifestó que el piloto César D'Antoni hizo un primer intento de aterrizaje en el cual el tren tuvo contacto con la pista, pero aumentó la velocidad de nuevo y alzó vuelo otra vez porque calculó que no iba lograr su objetivo.
El ex funcionario relató que después de sobrevolar otra vez la terminal aérea y descender la nave del techo de nubosidad que había en ese momento, el piloto se enfiló sobre la pista. García dijo que en la segunda caída el piloto del avión se 'comió' la pista, o sea que cayó muy adentro, y por eso el trayecto que le quedó no fue suficiente para aterrizar y se salió de la pista.
Afirmó que el avión cayó bien alineado, pero el problema fue 'un error del piloto porque cayó mucho después del inicio de la pista'. García dijo que después del impacto no perdió el conocimiento y salió por la puerta de emergencia y tocó tierra, descendiendo por una de las alas del avión.
'Era un vuelo normal', dice extranjero del vuelo TA-390
Don Camilo Torres era uno de los pasajeros del vuelo TA-390 de Taca. El extranjero que visita Honduras con regularidad por motivos de negocios agradeció a Dios por haberle salvado la vida. 'Era un vuelo normal, pero de repente el piloto hizo un intento fallido de aterrizar y dijo que había una nube muy baja que le dificultaba el aterrizaje.
Dimos una vuelta por la ciudad y luego de unos minutos volvió a intentar aterrizar y para mí que lo hizo muy rápido. Sentí que el avión rodó en la pista y luego caímos en la hondonada.
Es una bendición muy grande estar con vida. Estoy agradecido de que Dios me haya cuidado. Salimos por la puerta de atrás caminando', dijo. Don Camilo fue atendido por los cuerpos de socorro, que le colocaron un collarín.
El presidente del Consejo Nacional Agrario, Francisco Álvarez, fue uno de los pasajeros que resultaron ilesos. 'Hubo pánico; fue la reacción lógica de las personas. Logré salir con relativa normalidad del siniestro porque tenía la certeza de que mi familia me estaba esperando en la terminal'.
