A un mes del enorme daño que provocaron Eta y Iota en Honduras, sobre todo en la parte productiva de la zona norte, aún se pueden ver las terribles secuelas de las tormentas tropicales.
Las zonas más afectadas han sido las partes bajas localizadas más cerca de los caudalosos ríos Ulúa y Chamelecón, que nacen en el occidente.
Las potentes inundaciones dejaron decenas de muertos, puentes destruidos, carreteras dañas y miles de damnificados que están a la espera que comience el plan de reconstrucción que anunció recientemente el Gobierno.
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Para conocer a detalle el millonario plan de reconstrucción que ejecutarán las autoridades mire hasta el final el video de nuestra sección En Claves.