Luego de que se supo que el banquero, oriundo de la cabecera departamental, Jorge Bueso Arias falleció en Tegucigalpa, muchas personas que lo conocieron se acercaron a la agencia principal de Banco de Occidente, el cual fundó hace más de siete décadas, para ofrecer sus muestras de pesar.
En las afueras de la agencia bancaria, ciudadanos lamentaron el deceso de Bueso Arias, no sin antes reconocerle como una persona que siempre contribuyó con el desarrollo del occidente del país.
“Tuve el privilegio de conocerlo cuando tuve un problema de salud e iba a Teletón. Ahí lo miraba con frecuencia porque él (don Jorge) como miembro fundador procuraba que todos los pacientes tuvieran algo que comer. Él llevaba las cajas de comida”, relató la maestra María Alicia Sarmiento.
La maestra recordó que lo conoció cerca del año 2000, “mandaba comida a los enfermos del hospital y a la casa hogar. Fue un hombre muy servicial, de gran valor”.
Frente a la agencia bancaria sobraban anécdotas de ciudadanos, en su mayoría, adultos mayores, que relataban cómo, acercándose a don Jorge, habían agilizado trámites e incluso, evitar perder sus casas.
“Estaba a punto de perder mi casa por 9,000 lempiras, le pedí ayuda a don Jorge y él me respondió. Para mí fue una gran persona, él me apoyó y me dio palabras de aliento y oportunidades”, narró el ciudadano Gerardo Antonio Mejía.
Fátima Menjívar, originaria de Santa Rosa de Copán, contó que ha sido cliente de Banco de Occidente por muchos años.
“Tengo gran pesar porque don Jorge fue una persona que nos ayudó mucho, nunca nos negó un préstamo y cuando uno venía aquí al banco cuando él estaba, platicábamos con él. Alentaba a la gente a procurarse un mejor futuro, sin duda, fue una gran persona, humilde”.
Santa Rosa de Copán es la ciudad que vio nacer y crecer a Jorge Bueso Arias. Las personas mayores cuentan que era un banquero accesible que hizo realidad el lema de su empresa financiera.
Hoy su ausencia es notoria, ya que su casa luce vacía desde hace casi un año, cuando su salud empezó a decaer.
Sus empleados cercanos también lamentan su partida. Ayer, mientras se preparaban para asistir a su sepelio, trabajadores de la familia guardaban en cajas las adoradas orquídeas que don Jorge quería que adornaran su última morada.
El gerente de la agencia de Santa Rosa, Juan Miguel Alvarenga, quien trabajó de cerca con Bueso Arias, dijo que “estamos lamentando mucho la pérdida de un gran ser humano, una persona comprometida con sus clientes, con el banco y con toda la gente que lo rodeaba”.
Bueso Arias, a sus 104 años de edad, cumplidos el pasado 14 de septiembre, había logrado ganarse el cariño y el reconocimiento de sus empleados en sus diferentes empresas.
“Cumplimos 72 años como Banco de Occidente de la mano de don Jorge”, afirmó.