24/04/2024
12:27 AM

Piden ayuda para repatriar a doctora que murió en EEUU

Ángela Claribel Moya, de 33 años, peleó durante meses una batalla que la llevó hasta EEUU en un intento por salvar su vida.

San Pedro Sula, Honduras.

Tras una extensa batalla contra una grave condición en múltiples camas de hospital, que la llevó incluso a viajar a Estados Unidos para intentar salvar su vida, murió ayer en Miami la doctora Ángela Claribel Moya Chirinos.

La médico hondureña fue diagnosticada con fibrosis pulmonar idiopática. En mayo de 2021 recibió su trasplante pulmonar bilateral. En enero 2021 se contagió de covid 19 y desde esa fecha su estado de salud empeoró.

“Mi negrita linda, duerme en la presencia de Jehová Así lo quiso Dios, El seguirá siendo soberano Paso a mejor vida, es mi fortaleza que Ella está en sus manos Gracias a todas las familias y personas que me acompañaron en este proceso”, escribió en Facebook su esposo, Josué Corea.

En mayo de 2021 ya tenía el trasplante bilateral de pulmones.

Su familia clama ayuda y apela a la solidaridad de los hondureños para repatriar su cuerpo desde Miami. Habilitaron las cuentas bancarias 7200508153 (Banco Atlántida) 200003302228 (Banco Ficohsa) y 729742511 (Bac Honduras). Además, habilitaron el número de teléfono 3189-1650 para mayor información sobre las ayudas.

Esto escribió Ángela clamando ayuda

Antes de ser ingresada y conectada a máquinas, la doctora escribió este mensaje que fue difundido en grupos de Facebook: Mi nombre es Ángela Claribel Moya Chirinos, soy médico general, tengo 33 años, soy madre de dos pequeños tesoros, los que me dan la fuerza para no rendirme...En el año 2020 les solicité ayuda para mis gastos médicos en mi viaje a EEUU por mi diagnóstico de fibrosis pulmonar, ya que necesitaba un trasplante.

Con la ayuda de Dios y todos ustedes eso fue posible. En mayo de 2021 ya tenía el trasplante bilateral de pulmones. Todo estaba excelente, ya comenzaba a disfrutar la vida con mis dos hermosos tesoros Mateo y Luka y con mi hermoso rey, mi esposo Josué. Regresamos a Honduras en septiembre del 2021 a dar gracias a Dios, porque el milagro estaba hecho. Disfruté tiempo lindo con mi familia y en mi iglesia. Todo hermoso así como lo soñaba.

En enero de 2022 comencé a cansarme un poco, me trató el médico que me realizó el trasplante y al ver que no mejoré, viajé a EEUU con muchos problemas. Por mi seguro médico no pudieron concluir el seguimiento a mi condición médica. Regresé a Honduras nuevamente a seguir luchando, tratando de vencer al cansancio que día a día aumentaba.

El 15 de julio, día de mi cumpleaños 33 empieza mi mayor complicación. Ahora estoy en Unidad de Cuidados Intensivos del Instituto Nacional Cardiopulmonar o hospital del Tórax con sospecha de rechazo grave de pulmones, tengo que trasladarme a Estados Unidos, para que ahí puedan hacer algo más por restablecer mi salud.

El camino más fácil sería rendirme, pero mi mayor anhelo es vivir, contarle al mundo entero las maravillas que Dios ha hecho en mi vida. Quiero ver crecer a mis hermosos hijos, disfrutar de mi esposo, padres, hermanos, amigos y conocidos. Dios ha hecho muchas promesas para mí por eso me aferro a la vida y pienso que aún no es hora de irme. Yo anhelo vivir.