“Los campos están incomunicados, el agua se sigue filtrando y tenemos casi un mes sin poder trabajar”, inició narrando Calixtro Molina, un poblador de Las Chumbas, que se encontraba en el bordo de Campo Buena Vista monitoreando el nivel del río.
Desde el punto donde el bordo de contención se rompió, se podía observar como el Ulúa continúa ingresando con fuerza a esta comunidad, pese a que el nivel del río ha disminuido.
Molina explicó que el agua que entra por esa ruptura, atraviesa unas 25 comunidades. Desde Buena Vista, pasando por Soberanos del Norte, Río Chiquito, Las Flores y Las Cuchillas, hasta llegar a Las Chumbas, donde otra ruptura inundó el sector de Naranjo Chino.
“Más adelante, hay otros dos puntos de bordo que están dañados, cerca de Campo Amapa, estos llenaron al Kilómetro 70, El Paraíso, Voluntades Unidas, Monterrey, San José del Cayo, Pajuiles, las colonias Pavón 1 y 2, hasta llegar a Urraco Pueblo”, indicó.
El hombre (de 42 años), dio a conocer que hasta el sector de los excampos bananeros solo se puede ingresar con lancha y que los cuerpos de socorro y personas voluntarias están llevando alimentos a las personas que se encuentran atrapadas.
Sin Paso
En las mismas condiciones se encuentran los pobladores del sector de Finca 4 hasta Finca 11, donde el bordo de contención cedió a principios de esta semana.
En el municipio se han contabilizado 16 rupturas de bordos, las familias han decidido permanecer en los albergues hasta que pase la temporada de huracanes, por temor a otra llena.
Un equipo de Diario LA PRENSA visitó la zona el pasado martes y el agua llegaba hasta la entrada de Finca 4.Sin embargo, ayer la filtración iniciaba desde un par de cuadras antes y la profundidad había aumentado. El agua llegaba hasta la cintura.
Un poblador de Finca 8, que tuvo que cruzar nadando para poder llegar a la colonia Palermo, contó que en algunas comunidades el agua llega hasta el techo de las casas y las personas que decidieron quedarse , se encuentran en los bordos o en barracones.
Por su parte, en Urraco Pueblo, el acceso de vehículos está obstruido a la altura de Estero de Indio, donde el agua ha desbordado varios quineles y ha causado daños en la carretera.
Los pobladores de Urraco pagan entre 100 y 200 lempiras por cada viaje en lancha, para poder salir a comprar alimentos o acudir a citas médicas.
En esta localidad hay varios albergues habilitados, donde desde hace varias semanas permanecen las personas que viven en los barrios más afectados, como el Santos Alberto Canales, Buenos Aires, San Miguel y San Jorge. Además de varias familias de Campo Monterrey.
Didier Fúnez, presidente del patronato de Urraco Pueblo, informó que unas 1,300 familias están en los albergues. Mientras que, Ramón Rodríguez, coordinador del Centro de Operaciones de Emergencia (COE), detalló que los 33 albergues del municipio continúan operando y que en estos permanecen 5,958 personas.
Rodríguez destacó que hay varios equipos de la municipalidad trabajando en reparaciones provisionales de las rupturas cercanas al casco Urbano, como La Chilera y la colonia Centroamericana, con el propósito de mitigar el impacto de la reciente crecida del Ulúa.
Agregó que al bajar el agua, comenzarán a intervenir las demás zonas afectadas, para minimizar los daños que puedan causar futuros fenómenos naturales, pues recordó que la temporada de huracanes aún no termina.