Una jueza de Texas, Estados Unidos, impuso una fianza de un millón de dólares a un hondureño, acusado por el rapto de una menor de tres años de edad en esa misma región.
Holman Hernández fue detenido el domingo por agentes locales y ayer, martes, el juez le impuso la multa y le retiró el pasaporte. También se conoció que, de pagar la multa, a Hernández se le ordenará arresto domiciliario y tendrá que utilizar un grillete electrónico que será monitoreado por GPS.
Tampoco se le permitirá estar cerca de menores y deberá permanecer a al menos 500 pies de los mismos.
20 AÑOS EN ESTADOS UNIDOS
Los abogados de Hernández argumentan que el hondureño reside en aquel país desde hace más de 20 años, amparado bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS) y solicitaron a la Corte reducir la cifra de la fianza.
Los defensores de Hernández solicitaron a la jueza, en la audiencia del martes, que de un millón de dólares se baje a 100 mil dólares. Lo anterior justificando que el hombre de 50 años quería “cuidar” a la menor de 3 años.
“Él solamente cuidó a la bebé, es todo lo que pasó”, dijo el abogado a Univisión 45. Además aseguró que la pequeña estaba “sola en la calle”. La jueza desestimó la petición.
LOS HECHOS
El informe policial indica que a alrededor de las 2:00 a.m. la niña fue vista por última vez en el complejo de apartamentos donde reside junto con su familia. Según la policía, la pequeña salió de su apartamento y subió a la de su vecino, que estaba celebrando una reunión. Todos los presentes en el lugar se fueron y él quedó con la menor solo.
La ausencia de la niña fue notada hasta las 5:00 am., además de ver la puerta de la casa abierta, de inmediato dieron aviso a las autoridades por lo que horas después se activo la alerta Amber.
La alerta describió a la menor acompañada de un sospecho que conducía un carro Nissan, que sería identificado como Holman Hernández.
Tras esto, los agentes hallaron dentro de una habitación de un motel a Hernández, vistiendo una camisa y calzoncillos, y a la menor acostada en la cama utilizando solo una camisa y un pañal. Fue arrestado en ese mismo sitio, a pesar de haberse resistido.
La fiscalía del condado Harris acusa a Hernández de querer abusar sexualmente a la menor cuando estuvo en el hotel con ella y de secuestro agravado. Al parecer el hondureño se resistió al resto.
La niña fue llevada a un hospital para realizarle pruebas médicas para determinar si sufrió abuso y los cargos que deberá enfrentar el hondureño.
Hernández ya había tenido problemas con la justicia estadounidense. En el año 2005 había sido arrestado por conducir en estado de ebriedad y en el 2018 fue acusado de este mismo delito.
