Para el presidente de la bancada liberal en el Congreso Nacional, Yani Rosenthal, el reclamo de la sociedad civil para que se destituyera al titular de la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP), Eduardo Villanueva, se tergiversó al pretender quitar otros operadores de justicia.
“La sociedad civil cuando llegó al Congreso Nacional a lo que llegó fue a pedir la destitución del director de la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial, no llegó a pedir la destitución de ningún otro funcionario. Después de la pasarela es que ha surgido la propuesta que también destituyan al fiscal general de la nación.
“Ahora no pueden venir a devaluar y no pueden venir a decir que el fiscal no sirve si ellos mismos arruinaron la Fiscalía quitándole esa Agencia Técnica de Investigación Criminal”, destacó.
El parlamentario fustigó que la Secretaría de Seguridad tiene un robusto presupuesto, en comparación con sus pares de la región, y no ha logrado los buenos resultados de esos órganos.
“Al Ministerio de Seguridad el Gobierno le ha dado 300 millones de dólares anuales de presupuesto, allá en Nicaragua al Ministerio de Seguridad le dan 130 millones de dólares de presupuesto y con 130 millones logra que la tasa de asesinatos sea la décima parte de lo que es Honduras”, remarcó el legislador.
“Allí está esa Tasa de Seguridad que aprobó el Congreso Nacional, se han recaudado, entiendo, casi mil millones de lempiras, ni siquiera los han gastado. ¿Cuál era la gran prisa de poner ese impuesto?”.
Insistió en que la atribución y la obligación de darle seguridad al pueblo de Honduras, según la Constitución de la República, le corresponde al Presidente de Honduras, por lo que no es correcto que el Congreso Nacional le quite esa responsabilidad al presidente Porfirio Lobo.
Pero poco a poco, con aprobación de leyes y decretos, el Poder Legislativo tomó la batuta de la estrategia de seguridad, pero los resultados han sido negativos porque los índices de violencia sobrepasaron la capacidad del Estado.
