15/05/2025
10:54 AM

El Bechir desoye las acusaciones de genocidio del CPI

El Presidente sudanés Omar el Bechir bailó, levantó su vara de mando hacia el cielo en signo de alegría y lanzó varios 'Alá es grande' durante su primera aparición pública desde la petición de inculpación por el genocidio en Darfur por parte del fiscal de la Corte Penal Internacional, CPI.

El Presidente sudanés Omar el Bechir bailó, levantó su vara de mando hacia el cielo en signo de alegría y lanzó varios 'Alá es grande' durante su primera aparición pública desde la petición de inculpación por el genocidio en Darfur por parte del fiscal de la Corte Penal Internacional, CPI.

Apenas unas pocas horas después de haber sido inculpado por el fiscal de la CPI, Luis Moreno-Ocampo, como sospechoso de genocidio en Darfur, Bechir, que asistía a una ceremonia de ratificación de una nueva ley electoral, quiso transmitir a la comunidad internacional el mensaje de que la vida en Sudán continúa como si nada.

Sentado sobre una tarima del gran Salón de la Amistad, construido por los chinos en Jartum, el presidente sudanés fue aclamado por medio millar de fieles y altos funcionarios del Gobierno.

Bechir, que vestía una larga túnica blanca tradicional, no dio ningún discurso, pero gritó varios 'Alá es grande' durante una ceremonia que duró una hora y en la que hubo fuegos artificiales, baile y un picnic en los parques públicos.

La ceremonia estaba destinada a apoyar una nueva ley electoral aprobada la semana pasada por el parlamento y que prevé la celebración de elecciones el próximo año, según lo estipulado en el acuerdo de paz entre el Norte y el Sur, firmado en 2005.

Los oradores acogieron con beneplácito ese 'momento histórico' de 'la reconciliación del pueblo sudanés'. La decisión del Fiscal de la CPI para pedir a los jueces de la corte que emita una orden de detención contra el presidente de Sudán de 'genocidio' en Darfur fue rechazada por otros oradores que tomaron parte en el acto. Uno de ellos habló de 'conspiración política', mientras que otro aseguró: 'Señor presidente, no le tocarán jamás'.

Primera actualización a las 8.41 am de hoy lunes (14.41 GMT)
Fiscal de CPI pide inculpación y orden de arresto contra presidente sudanés

El fiscal de la Corte Penal Internacional, CPI, Luis Moreno Ocampo, pidió este lunes a los jueces de la CPI que emitan una orden de arresto contra el presidente sudanés Omar El Bechir por 'genocidio', 'crímenes de guerra' y 'crímenes contra la humanidad' en Darfur (oeste de Sudán), según un comunicado.

Desde Jartúm, Sudán rechazó inmediatamente la petición de inculpación del fiscal. 'Ahora estamos contra la CPI y rechazamos toda decisión de la CPI', afirmó a la AFP el portavoz del gobierno, Kamal Obeid.'

Presenté hoy (lunes) a los jueces elementos de prueba que demuestran que el presidente de Sudán, Omar Hassan Ahmad El Bechir, cometió crímenes de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra en Darfur', indicó el fiscal argentino en una conferencia de prensa en La Haya.

'Pedí que expidan una orden de captura', agregó. 'En el campo, las fuerzas de El Bechir matan hombres y violan a mujeres. El quiere meter un punto final a la historia de los pueblos fur, masalit y zaghawa', afirmó Moreno Ocampo, quien precisó que acusa a Omar El Bechir de tres cargos de genocidio.

Él 'utilizó el ejército' y 'enroló a milicias' para cometer el genocidio, añadió el fiscal.'Lo que ocurre en Darfur es la consecuencia de la voluntad de El Bechir. El crimen de genocidio es un crimen de intención (...). Vamos a probarlo, pues eso pone en peligro la vida de la gente que vive en el campo', dijo mientras proyectaba videos donde los desplazados del conflicto son interrogados.

La decisión de los jueces, que dependerá de la solidez de las pruebas aportadas por Moreno Ocampo, podría demorar varios meses Se trata de la primera petición de arresto de un jefe de Estado en ejercicio por parte de la CPI, el único tribunal permanente con competencias para juzgar a los autores de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y genocidio.

El ministro de Relaciones Exteriores de Sudán había advertido que toda medida de la CPI contra Omar El Bechir podría 'destruir el proceso de paz' en Darfur y hundir al país en el 'caos'. Sin embargo, el domingo por la noche las autoridades sudanesas prometieron proteger a las organizaciones internacionales y a su personal.

También el domingo un millar de sudaneses manifestó en Jartum, gritando consignas antiestadounidenses e islamistas. Temiendo el desorden, la ONU elevó el nivel de alerta para su personal presente en Darfur, sobre todo en la fuerza híbrida ONU-Unión Africana, encargada de mantener la paz.

El lunes, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se mostró preocupado y dijo que la posible inculpación de El Bechir 'tendría repercusiones negativas muy serias sobre la operación de paz, incluido el proceso político. Me preocupa mucho, pero nadie está libre de un proceso judicial', explicó en una entrevista con el rotativo francés Le Figaro.

Por su lado, las organizaciones rebeldes de la región saludaron desde el viernes 'una buena noticia para el pueblo de Darfur'.

La inquietud de que la inculpación del presidente sudanés ponga en peligro el proceso de paz predominaba en la Organización de la Conferencia Islámica y en la Unión Africana, mientras que la Liga Árabe convocó una reunión extraordinaria para el próximo sábado.

'Se decidió que una reunión urgente de los ministros árabes de Relaciones Exteriores tendrá lugar el sábado en la sede de la Liga en El Cairo', dijo a la prensa el jefe de gabinete del secretario general de la Liga Arabe, Hicham Yussef.

La CPI ya emitió dos órdenes de arresto contra sudaneses implicados en el conflicto, pero Omar. El Bechir siempre se ha negado a entregarlas. Moreno Ocampo pide desde abril de 2007 la detención de Ahmed Harun, actual ministro sudanés de Asuntos Humanitarios, y de Ali Kosheib, un jefe de la milicia pro gubernamental 'janjawid', que sigue presente en Darfur.

En marzo de 2005, el Consejo de Seguridad ordenó en una resolución al fiscal de la CPI abrir investigaciones sobre los responsables de asesinatos, violaciones y pillajes que asolan la región.

Desde 2003, las fuerzas gubernamentales apoyadas por las milicias árabes 'jannjawid' luchan contra varios movimientos rebeldes en Darfur.

El balance del conflicto es de más de 300.000 muertos y 2,2 millones de desplazados, según la ONU. Las autoridades de Jartum sostienen que sólo han muerto unas 10.000 personas.

La Corte Penal Internacional es el primer tribunal permanente que juzga a autores de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y genocidio.