05/12/2025
06:32 AM

Con iluminación buscan mantener índices bajos de violencia en Tela

Tela, Honduras.

Para mantener bajos los índices de violencia, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, alcaldía y Secretaría de Seguridad trabajan en un proyecto de iluminación en el municipio.

La primera fase consistió en la instalación de 600 lámparas en 30 barrios y colonias del casco urbano. Unido a eso también hay construcción y mejoras de postas en puntos estratégicos de la ciudad.

El proyecto denominado Caminando por una Tela iluminada viene a terminar con una necesidad que venían teniendo los pobladores y que por muchos años buscaron apoyo ante la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) y nunca tuvieron respuesta.

A los actos de inauguración asistieron el alcalde Mario Fuentes, representantes de Usaid, Seguridad, dirigentes de patronatos y pobladores. “Estamos muy agradecidos con Ana Leverón, directora del programa Honduras Convive, pues ella fue clave para que la obra sea una realidad, de igual manera al resto de cooperantes”, expresó Mario Fuentes, alcalde teleño.

Foto: La Prensa

El alcalde Mario Fuentes se dirige a los pobladores durante la inauguración del proyecto de iluminación.
Agregó que hasta el momento Tela es una de las ciudades turísticas donde los índices de criminalidad se mantienen bastante bajos, situación que los obliga a continuar trabajando en proyectos como esos para darle paz y tranquilidad a los pobladores.

“Hace unos días se inauguró una posta en el barrio El Paraíso; la visión es que la Policía tenga buenos inmuebles para que la labor sea más efectiva”.

El funcionario expresó que la inversión supera el millón de lempiras. Las lámparas viejas son reparadas y serán instaladas en algunas aldeas donde no cuentan con alumbrado público. El oficial Alex Cubas, bajo quien estuvieron los agentes que ayudaron a desarrollar los trabajos, se mostró satisfecho y prometió a los vecinos continuar con la misma “labor en la zona para bien de todos”.

Desde hace unos días, las calles de los barrios y colonias de esta ciudad dejaron de ser sitios oscuros y de estadía de personas sospechosas; la iluminación es total. La falta de claridad evitó por mucho tiempo que los vecinos salieran a caminar en la zona y parques, eso quedó en el pasado. “Gracias a Dios hoy nos sentimos más tranquilos y seguros”, comentó el habitante Sergio Güity.