Un exnarcotraficante que coopera con el Departamento de Justicia de Estados Unidos en el juicio por narcotráfico contra el exdiputado hondureño y hermano del presidente Juan Orlando Hernández, Juan Antonio (Tony- Hernández), aseguró ayer en Nueva York que compró al acusado 15,000 kilos de cocaína y armas potentes.
Fernando Josué Chan Monroy que cumple sentencia por narcotráfico en Nueva York aseguró que vendió la droga que compró a Hernández, algunas con la marca Tías, y TH (supuestas iniciales del procesado), al cartel de Sinaloa y los Caballeros Templarios en México, y que su destino era Estados Unidos.
Con el testimonio de Chan Monroy y las comparecencias del agente estadounidense George Papadoupoulous y del experto en armas Cody Toy de la ATF (Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos), la Fiscalía concluyó la etapa de presentación de pruebas contra el acusado y este día las dos partes presentarán los argumentos finales.
| Testigo. Fernando Josué Chan Monroy dijo ayer en la Corte de Nueva York que él compró cocaína con el sello TH.
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El juez Kevin Castel, al finalizar la jornada de presentación de cargos, sugirió que el jurado debe tomar una decisión unánime.
Guatemalteco
Ayer, cerca ya del final del juicio contra Hernández, Chan Monroy manifestó que en tres ocasiones compró cocaína proveniente de los laboratorios del acusado: 600 kilos y dos veces 700 kilos, a $10,000 el kilo.La droga debía ser pagada en billetes de 100 dólares por exigencia de Hernández y el primer cargamento le fue entregado al testigo en El Espíritu, en la región hondureña de Copán, afirmó durante el interrogatorio de la Fiscalía.
Juicio Tony Hernández: Las imágenes presentadas por la Fiscalía de NY
De acuerdo con el testigo, el narco Toñito Santos le dijo que “Tony Hernández fue quien suplió la droga” y también que la negociación para la segunda compra de 700 kilos la hizo directamente con Hernández.
El testigo dijo que Santos le informó de que habría una reunión con Hernández “para comprar 700 kilos” de cocaína y le advirtió de que con este (el acusado) “no se podía jugar” y que los podía matar.
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También que Hernández le dijo durante una primera reunión que tuvieron en 2009 que “podía conseguir cualquier clase de armas” y que incluso hablaron de la F-7, conocida como la “matapolicías”.
Posteriormente, en 2012, le compró 40 fusiles M-16, de los que Chan Monroy se quedó con ocho y vendió el resto al Güero, miembro del cartel de Sinaloa, junto con 600 kilos de cocaína marcadas con las letras TH.
Durante la primera reunión de 2009, el testigo y el acusado hablaron de las marcas que presuntamente Hernández usaba para identificar sus cargamentos: TH, Tía, El 5, Lava y Muñeca.
Al finalizar dicha reunión, cuatro hombres vestidos de militares y con fusiles esperaban por Hernández en el estacionamiento del hotel adonde se reunieron.
Además, aseguró que Hernández los envió (a él y a Santos) a hablar con el jefe de la Policía de la región de Copán para que le informaran sobre los planes para transportar los 700 kilos de droga.
El testigo, quien reconoció haber asesinado a 15 personas y haber traficado al menos 200,000 kilos, también aseguró a la Fiscalía que un hombre, al que identificó en una foto por el nombre de Carlitos, le aseguró que era “muy amigo” de Hernández y que este le suplía droga al narco Víctor Hugo Díaz, alias el Rojo.
Igualmente le dijo que Hernández “era una persona que mataba a cualquiera que no le gustara”.
Antes de que se sentara en el banquillo el narco guatemalteco, el agente George Papadoupoulous comenzó la jornada con el relato sobre la entrevista que le hizo a Tony en 2016.
Papadoupoulous recordó que Tony, durante la entrevista efectuada el 25 de octubre de 2016, mintió ante una autoridad de Estados Unidos porque en esa ocasión aseguró que no conocía al narcotraficante Devis Rivera Maradiaga.
El viernes anterior, Rivera Maradiaga, quien está en una prisión en Nueva York desde 2015, en espera de ser sentenciado, aseguró que pagó sobornos a jueces, militares, policías, a políticos como Tony Hernández y su hermano, así como a Julián Pacheco Tinoco, actual ministro de Seguridad.
Según el testigo, también que en 2014 le informaron de que Tony quería trabajar con él en el narcotráfico y que este le ayudaría para que el Gobierno le pagara el dinero que le debía desde la época del presidente Porfirio Lobo.
El testigo, quien dijo haber ganado unos $50 millones con el narco, creó la empresa Inrimar para obtener contratos del Gobierno de Lobo Sosa para construir carreteras y así blanquear dinero del narcotráfico.
Antes de encontrarse con Tony en un restaurante de Tegucigalpa se reunió con Óscar Ramírez, abogado de Hernández, a quien le entregó $50,000.
El encuentro
La reunión con Tony ocurrió entre enero y febrero de 2014 para hablar sobre los contratos; pero el tema del narcotráfico se discutiría en una segunda reunión, según él.De acuerdo con el exnarco, el día que conoció a Tony grabó la reunión como parte de su cooperación con la DEA, usando un reloj de muñequera que él mismo compró. Partes de este video fueron presentadas como evidencia.
La semana pasada también se sentó en el banquillo como testigo Giovani Rodríguez, un expolicía corrupto, quien aseguró que trabajó para el acusado, a quien proveía información y protegía cargamentos de cocaína para evitar que fueran robados o decomisados.
Rodríguez, quien ingresó en la Policía Nacional de Honduras en 1991, declaró tanto a la Fiscalía como a la defensa que nunca conoció a Hernández en persona.
Rodríguez, quien hace tres años está en la Metropolitan Correctional Center en Manhattan tras entregarse a las autoridades de Estados Unidos en 2016, indicó que trabajó para Tony y el Rojo.
Antes de esos narcos, el 7 de octubre, el exalcalde Alexander Ardón aseguró que el acusado ordenó el asesinato de dos traficantes en 2011 y en 2013 y también que el expresidente Lobo usó el Ejército para proteger a narcos.
Ardón, quien se entregó a la justicia este marzo, relató que en 2011 surgieron problemas en la región de Copán, en la que él era el máximo responsable político de la localidad de El Paraíso, con otro narcotraficante identificado como Franklin Arita.
Cuando Ardón le informó a Tony que el problema con Arita era que este no permitía el paso de los cargamentos a través del territorio que controlaba con destino a Guatemala, Tony dijo que lo mataría.
“Tony me dijo que había que asesinar a Arita”, declaró el testigo, que se ha declarado ante la Fiscalía estadounidense culpable de narcotráfico y de asesinar a 56 personas.
Para ello, según explicó Ardón, Tony habló con el jefe de la Policía de la región de Copán, Juan Carlos Bonilla, alias el Tigre, y después Tony le confirmó que Arita había sido asesinado.
Ese narcotestigo dijo que el capo mexicano Joaquín el Chapo Guzmán entregó en 2013 un millón de dólares al acusado para la campaña de su hermano y actual presidente. Explicó que en una reunión celebrada en este municipio, el Chapo entregó el millón de dólares en paquetes de 50,000 y 100,000 dólares a Tony.
En este juicio, el Rojo se convirtió en el primero en testificar contra Tony con escandalosas acusaciones. Por ejemplo, aseguró que dio $40,000 para la campaña de diputación (de 2005) de Juan Orlando Hernández.
En la audiencia, el Rojo que lleva 17 meses en prisión, también involucró en su declaración al diputado Juan Carlos Valenzuela sobre presuntos pagos para facilitar el tráfico de drogas en Honduras.
Ayer, luego que la Fiscalía concluyera la presentación de sus testigos, el juez Castel le preguntó a Tony si sabía cuál era su derecho a testificar o no testificar, obteniendo un “entiendo” por respuesta.
Su abogado dijo que era “su decisión” no ocupar la silla de los testigos, agregó el juez.
“Así es señor”, afirmó Hernández, cuyo juicio comenzó este 2 de octubre y en el que varios exnarcotraficantes que cooperan con el Departamento de Justicia de EUA han sido testigos de la Fiscalía, tras un acuerdo de cooperación, en espera de que se les reduzca las sentencias.
Línea de tiempo: caso Tony Hernández. En la etapa de presentación de pruebas, desde el inicio del juicio el 2 de octubre hasta ayer,comparecieron Víctor Díaz Morales, Alexander Ardón, Giovani Rodríguez, Devis Leonel Rivera y Fernando Josué Chang Monroy. La Fiscalía mostró narcolibretas, un video de la reunión de Tony y Rivera Maradiga, fotos de armas y de la coca con TH.
