Preocupa el nuevo plan de ICE para realizar redadas masivas en EE UU
El nuevo plan de ICE genera preocupación legal por los posibles problemas y confusiones que podrían surgir al aplicarlo.
- 13 de noviembre de 2025 a las 15:57 -
El nuevo plan de ICE (La Agencia de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos) genera preocupación legal por los posibles problemas y confusiones que podrían surgir al aplicarlo.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) piensa implementar en su estrategia operativa la inteligencia artificial. Ese es el nuevo anuncio que se conoció en las últimas horas, según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
La agencia decidió apostar por la tecnología y la inteligencia artificial como aliadas en su nuevo esquema de redadas, una maniobra que busca combinar precisión con eficiencia en cada operativo.
ICE reveló que implementará sistemas de inteligencia artificial capaces de comunicarse en español con los detenidos latinoamericanos, reduciendo así errores de interpretación durante los procesos.
Ellos aseguran que esta medida pretende mejorar la comprensión mutua entre los agentes y los migrantes hispanohablantes en situaciones de alta tensión y complejidad legal. Sin embargo, en otros sectores genera preocupación legal por los posibles problemas y confusiones que podrían surgir al aplicarlo.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) confirmó que se evalúa el uso de traductores automáticos en las redadas masivas para explicarles a los migrantes derechos y procedimientos a los que son sometidos.
Fuentes cercanas al DHS adelantaron que los agentes podrían portar próximamente esos dispositivos con reconocimiento de voz y traducción simultánea.
Por ahora el ICE usa Mobile Fortify, una app que permite identificar a las personas detenidas mediante lectura facial y toma de huellas dactilares sin contacto.
Es importante decir que la IA puede fallar al reconocer rostros o datos biométricos, lo que podría llevar a que personas con estatus legal sean detenidas por equivocación.
Además, los sistemas automáticos pueden malinterpretar frases, acentos o contextos, generando confusión sobre derechos, procedimientos o instrucciones críticas. La tecnología podría favorecer respuestas rápidas, pero no necesariamente justas o sensibles al contexto del migrante.