Desesperados por llegar a EEUU, migrantes hondureños se lanzan al río Bravo
Cientos de migrantes arriesgan sus vidas al cruzar en inflables el peligroso río Bravo.
- 13 abril 2023 /
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1 / 10Grupos de migrantes, entre los que se encuentran hondureños, guatemaltecos y venezolanos, desafían la muerte al lanzarle en inflables para cruzar el caudaloso río Bravo en un intento desesperado por llegar a Estados Unidos tras permanecer varados varias semanas en el norte de México.
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2 / 10Este grupo de migrantes buscaba obtener una cita para solicitar asilo en Estados Unidos a través de la aplicación CBP One, sin embargo, los fallos en la app no les permite realizar el proceso por lo que se vieron obligados a cruzar el río para ingresar ilegalmente al país norteamericano.
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3 / 10Apoyados en inflables, sogas y botellas de plástico, niños y adultos atraviesan el caudal que, tras lluvias crecientes, acarrea una corriente peligrosa.
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4 / 10“Tenemos más de un año de estar aquí esperando y nada. La única opción que tenemos en este momento es cruzarnos”, dijo el hondureño Maynor David.
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5 / 10Los migrantes cruzan en flotadores que son atados a una soga del otro lado del río y así desafían las fuertes corrientes.
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6 / 10Las escenas son usuales desde finales de 2022, cuando también con un alto caudal, sudamericanos y centroamericanos cruzan el río que divide a México de Estados Unidos sin importar que del otro lado ya haya agentes estadounidenses para interceptarlos.
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7 / 10Los agentes de la Patrulla Fronteriza estadounidense rescataron a un grupo de migrantes que se quedó atrapado en el río el fin de semana.
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8 / 10“Voy con Dios y es el único que nos fortalece en esto. Hemos pasado hambre, frío, de todo”, aseguró la hondureña Belem Janeth Orellana.
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9 / 10En el otro extremo de la frontera, los migrantes han instalado un campamento junto al muro en Tijuana, Baja California, a la espera de poder realizar la cita para solicitar asilo.
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10 / 10La desesperación de los migrantes ha crecido desde que Estados Unidos anunció en enero nuevas medidas para acoger a 30.000 migrantes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba mediante una aplicación, pero con la deportación inmediata a México del resto que cruce la frontera de manera irregular.