"Israel logró matarme": Anas al Sharif, el periodista que mostró al mundo el horror en Gaza
El reportero que falleció en un bombardeo israelí dejó una carta de despedida.
- 11 de agosto de 2025 a las 08:49 -
Si estas palabras mías les llegan, sepan que Israel ha logrado matarme y silenciar mi voz", así arranca la carta de despedida del periodista Anas al Sharif del canal catarí Al Jazeera, que dejó escrita meses atrás ante el temor de que Israel lo matara.
"Viví el dolor en todos sus detalles, probé la angustia y la pérdida una y otra vez, y aun así, nunca dudé en transmitir la verdad tal como es, sin falsificaciones ni distorsiones", prosigue la carta firmada por el reportero el pasado 4 de mayo.
Poco antes de esta medianoche, un bombardeo israelí de precisión atacó la tienda de campaña en la que se encontraba Al Sharif y otros compañeros periodistas de la ciudad de Gaza, cerca de las inmediaciones del hospital Al Shifa.
"¡Es Anas! ¡Han matado a Anas! ¡Lo amenazaron más de un millón de veces!", gritaban desesperados compañeros de profesión y gazatíes en un vídeo difundido en redes sociales, cuando descubrieron el cuerpo ensangrentado de Al Sharif, convertido en uno de los periodistas más admirados por el pueblo gazatí y respetado por la prensa internacional.
Entre ellas, cuando el 23 de julio Adraee tildó de "un drama inventado" y de "lágrimas de cocodrilo" un vídeo en el que el reportero Al Sharif se derrumba mientras realizaba un directo en el que informaba sobre las muertes de niños por la desnutrición. Además de acusarlo de ser parte "de una falsa campaña de Hamás sobre el hambre".
El propio Anas era consciente de que, en cualquier momento, podía ser objetivo de los ataques de las tropas israelíes. Ese miedo, de hecho, se había agudizado en estas últimas semanas después de que el portavoz en árabe del Ejército, Avichay Adraee, vertiera nuevas acusaciones sobre su trabajo.
"Vivo con la sensación de que podrían bombardearme y convertirme en mártir en cualquier momento. Mi familia también está en peligro, y ya he pagado el precio", trasladó al Sharif al Comité para la Protección de Periodistas (CPJ).
El de anoche fue un ataque que también mató a otros tres periodistas del canal catarí que dormían en la misma tienda: el reportero Mohammed Qreiquea y los fotógrafos Ibrahim Zaher y Mohamed Aliwa, además de su conductor, Mohammed Nofal.
Todos ellos formaban parte del equipo la cadena de la ciudad de Gaza. Sus micrófonos y cámaras se apagan cuando lsrael prepara sus planes de ocupación de la capital gazatí después de haber matado ya a más de 61.000, según los datos del Ministerio de Sanidad.
Anas deseaba volver a vivir el momento del pasado mes de enero, cuando contó en directo la llegada del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás. En esa retransmisión, rodeado de gazatíes celebrando la noticias, se quitó el chaleco y el casco, un momento que se viralizó en redes sociales.
Ya no lo va a poder hacer. Su voz y su relato se apagan mientras Israel sigue impidiendo a la prensa extranjera que su acceso a una devastada de Franja de Gaza.
Media hora antes de que una de esas bombas impactara contra la tienda de campaña donde se alojaba, en las inmediaciones del hospital Al Shifa, el joven periodista, de 28 años, continuó documentando la masacre israelí y compartió un último vídeo en sus redes sociales en el que mostraba las explosiones sobre la ciudad de Gaza.