Ejecutan a expolicía que mandó a matar a su esposa en Texas

Robert Fratta, de 65 años, en 1994 contrató a dos personas para mandar a asesinar a Farah Fratta.

La ejecución de Fratta se puso en duda unas horas antes, el expolicía es uno de los cuatro condenados a muerte que demandaron a la prisión estatal alegando que se han usado drogas expiradas.

Robert Fratta fue ejecutado por el asesinato de Farah Fratta en 1994, él fue la primera persona en el estado de Texas en recibir la inyección letal este año.

Fratta no dirigió sus últimas palabras solo miró directo al techo y no se habló a los testigos de las víctimas.

“Su consejero espiritual estuvo con él, le tomó la mano y rezó, 24 minutos después fue pronunciado muerto, indicó Jason Clark”, jefe de gabinete del Departamento de Justicia Criminal en Texas.

“Rober Fratta demostró que era lo peor de lo peor a través del acto cobarde de contratar a otros para que hicieran su trabajo sucio y luego se escondió detrás de su posición de autoridad como oficial de la ley para intentar eludir la responsabilidad”, indicó la fiscal Kim Ogg.

En 1994, Fratta, un oficial de seguridad pública de Missouri City, planeó el complot para matar a su esposa porque se estaban divorciando y sostenían una batalla por la custodia de sus tres hijos.

Durante las audiencias se demostró que Fratta dejó en claro que quería ver muerta a Farah y contrató a dos hombre que asistían al gimnasio con él para concretar su deseo el 9 de noviembre de 1994.

Fratta fue encontrado culpable de asesinato en 1996 pero algunas de las pruebas presentadas fueron consideradas inadmisibles, la sentencia fue anulada y fue juzgado otra vez en 2009 y otra vez fue encontrado culpable.

Dos de los tres hijos de la pareja testificaron en el segundo juicio, la hija mayor que en el momento del asesinato de Farah tenía 4 años, dijo que al visitar a su padre en la cárcel, no mostró ningún tipo de arrepentimiento por haber matado a su madre.