Cuando Margot Robbie entra en una habitación, está consciente de algunas expectativas.
“La gente puede pensar que soy una rubia boba”, afirma. “Eso de hecho es perfecto, pues lo único que puedo hacer a partir de eso es impresionarla. Para mis adentros sé que parezco la rubia tonta, pero voy a asombrar a todos”.
Eso fue lo que hizo con Martin Scorsese, que seleccionó a la australiana como pareja de Leonardo DiCaprio en The wolf of Wall Street (El lobo de Wall Street), en 2013, lo que le abrió la puerta a toda una nueva serie de expectativas.
“Después de haber hecho una película con Scorsese, voy a hacer la prueba para un papel y la gente dice que, como ya estuve en una película de Scorsese, tengo que ser brillante para ella”, agrega Robbie riendo. “Pero pienso que me ponen los requisitos muy altos”.
Pero primero veremos Z for Zachariah, que se estrena en todo Estados Unidos el 28 de agosto. Robbie actúa al lado de Chris Pine y Chiwetel Ejiofor en una historia de amor y suspenso posapocalíptica basada en una novela de Robert C. O’Brien. Dirigida por Craig Zobel, la película recibió muy buenas críticas en el Festival Cinematográfico de Sundance este año y fue adquirida por Roadside Attractions.
Robbie interpreta a Ann Burden, una aldeana que sobrevivió a una guerra nuclear, pero descubre que es el último ser humano vivo. “Es una hermosa historia sobre gente que lucha contra la soledad”, explica la actriz. “Es acerca de una relación humana contra todas las probabilidades. Mi personaje realmente piensa que está sola”.
| Este mes llega al cine su cinta “Z for Zachariah”, en la que actúa con Chris Pine
(izquierda) y Chiwetel Ejiofor (derecha) en una historia de amor y suspenso posapocalíptica. |
Ann es joven, ha vivido protegida y tiene poco don de gentes; es una mujer de buenas intenciones, pero insegura de sus propios sentimientos. Al enfrentarse con dos hombres extraños en circunstancias totalmente insólitas, ella tiene que averiguar qué siente realmente.
“Al estar cerca de estos dos hombres va teniendo sentimientos pero no sabe cómo manejarlos”, explica Robbie. “Yo traté de pensar que es una mujer que no tiene experiencia con la gente y con las relaciones. Y me preguntaba una y otra vez cómo pensaría ella que debería de comportarse.
Ella trata de pensar en la relación de sus padres y, en cierto modo, se encuentra desempeñando un papel. Eso la pone incómoda”.
“Es horrible hacer escenas de amor”, asegura Robbie juguetonamente. “Es un trabajo difícil pero, a fin de cuentas, alguien tiene que hacerlo. No, ya en serio, las escenas de amor son maravillosas”, aclara. “Y me tratan de maravilla”.
La vida en el plató cinematográfico está a un mundo de distancia de la granja de sus abuelos en Dalby, donde Robbie pasó buena parte de su infancia con sus tres hermanos. Fue criada por su madre, fisioterapeuta de profesión, que la alentó a seguir su sueño de actuar.
La universidad fue un buen campo de entrenamiento: como estudiante de teatro en Somerset College pudo meterse en diferentes papeles.
“Yo iba a las fiestas de otras universidades con todos mis amigos”, recuerda, “y alguien me preguntaba si me conocía. Yo le respondía que sí, que estudiaba allí. Entonces ellos me preguntaban qué estudiaba y sin vacilar un segundo les respondía Biología Marina”.
Después de graduarse se fue a vivir a Melbourne para actuar y ahí la contrataron para las películas Vigilante (2008) y ICU (2009). En 2008 fue seleccionada para encarnar a Donna Freeman en la popular telenovela australiana Neighbours. Dos años después llegó a Hollywood, donde participó en Pan Am (2011), serie dramática de televisión de corta duración.
The Wolf of Wall Street lanzó su carrera en Estados Unidos.
“Fue terriblemente intimidante hacer la prueba para Martin Scorsese”, admite. “Pero, una vez que estuve en la sala, todo fue muy inspirador”.
“Eran las seis de la mañana y yo había estado nadando en una isla cuando recibí una llamada que me avisó que tenía que hacer una prueba con Will Smith al día siguiente en Nueva York”, recuerda. “Le pregunté a la señora de la hostería donde yo estaba cómo podía salir de la isla. Ella me respondió: ‘Solo hay un bote al día y sale dentro de veinte minutos’”.
Llegó corriendo al avión todavía con la ropa húmeda, de ahí voló a Francia y después a Nueva York.
“Me perdieron el equipaje”, continúa Robbie, “así que llegué a la prueba con zapatos de lona aún mojados, pantaloncillos de mezclilla y una camisa de piyama, que de hecho era lo único seco que traía puesto. Mortificada, encontré una tienda Top Shop, entré corriendo y por lo menos pude comprar una blusa seca antes de conocer a Will. ¡Me veía espantosa!”.
De todos modos consiguió el papel y volverá a trabajar al lado de Smith en Suicide squad, programada para 2016. Él interpreta al maestro asesino Deadshot, ella es la imprevisible Harley Quinn, una siquiatra desquiciada enamorada del Joker (el Guasón), Jared Leto.
“Me encanta Harley Quinn”, afirma Robbie. “Tiene muchos niveles. Y además está la idea de interpretar a alguien que no es muy agradable. Interpretar a un personaje malo siempre es más divertido que interpretar al bueno”. Leto resultó ser bastante guasón en la vida real, como cuando le dio a Robbie un regalo que consistió en una rata viva.
Sin embargo, en lugar de chillar de horror o de matarla, como algunos de los técnicos le propusieron que hiciera,Robbie simplemente sonrió y conservó a la rata como mascota, llamándola Rat Rat. “Está muy mimada”, afirma Robbie. La actriz puntualiza que ha tenido mucha suerte como actriz, pero trata de no dar nada por sentado en su vida.
Edad: 25 años
Ciudad: Gold Coast, Queensland, Australia
Trabajos Conocida por interpretar a Donna Freedman en la serie australiana “Neighbours” y a Naomi Lapaglia en la película “The wolf of Wall Street”.
Es hija de Sarie Kessler, tiene tres hermanos: Lachlan “Lockie” Robbie, Cameron Robbie y Anya Robbie.
En 2009 fue la joven embajadora de personas desaparecidas durante la Semana Nacional de la Juventud.
Es muy buena amiga del actor Sam Clark y las actrices Ashleigh Brewer, Caitlin Stasey y Christina Ricci. Desde 2014 sale con el asistente de director británico Tom Ackerley.