El carismático Enrique Iglesias siempre se ha presentado ante el público como un gran amante de los animales, especialmente de los perros que juegan un papel esencial en su vida cotidiana.
Tanto es así, que además de compartir juegos y travesuras con sus mascotas, el cantante español no duda en involucrarles directamente en el proceso creativo de sus proyectos musicales. “Cuando termino un disco, lo primero que hago es enseñárselo a mis perros. Si ladran, significa que la canción es mala. Si no ladran, significa que la canción no les molesta”, señaló durante una entrevista al portal Teleshow.
Verdaderos críticos
Pero sus perros no son los únicos que se ven obligados a escuchar sus maquetas una y otra vez antes de convertirse en bailables canciones, ya que el simpático artista “vuelve loco” a todo su entorno con preguntas y peticiones cuando está enfrascado en la composición de un nuevo trabajo discográfico, sobre todo a su pareja, la extenista Anna Kournikova. “Sí, por supuesto se las pongo también a mi novia.
Tiene que escucharlas lo quiera o no, porque suelo reproducir las canciones en casa a todo volumen, constantemente.
Sobre todo cuando estoy preparando un nuevo álbum, suelo escuchar las canciones miles de veces y pido opiniones.
Todo aquel que está a mi alrededor acaba volviéndose loco por mi culpa”, desveló el hijo de Julio Iglesias. Aunque disfruta de una imparable carrera musical de más de dos décadas, Enrique Iglesias se considera un artista muy exigente consigo mismo, por lo que no duda en buscar la “perfección” en cada uno de sus trabajos.