Hay muchas formas de sacar provecho de las vitaminas. Las puedes consumir sin darte cuenta, mientras comes, ya que están presentes en los alimentos. O puedes ir a por ellas sin tapujos y tomar complejos vitamínicos o pastillas. Se dividen en dos grandes grupos: liposolubles e hidrosolubles. Las del primero, al que pertenecen las vitaminas A, D, E, K y F, se disuelven y conservan en grasa, por lo que el organismo (y las cremas) las almacenan en su interior. El resto: C, H y el grupo B, son solubles en agua, motivo por el que desaparecen fácilmente del organismo y se requiere un aporte diario.
Para cubrir las necesidades diarias de vitaminas es necesario ingerirlas.
A: Protege y regenera la piel
¿Te suena el retinol? Seguro que lo has leído en el envase de multitud de cremas. Pues no es otra cosa que vitamina A. Su principal función es proteger la piel y regenerarla cuando está dañada, es la responsable de la firmeza de los tejidos. Si careces de ella, la piel se muestra frágil y reseca. Si comes zanahorias o espinacas, estarás regalando a tu organismo vitamina A.
B2: fuerza en uÑas y el cabello
Conocida como «riboflavina», fortalece tanto el cabello como las uñas. En general ayuda a mantener saludable el organismo y endurece y conserva la envoltura de los nervios. Las personas que la carecen presentan grietas en la comisura de los labios y lesiones en la piel. Los fumadores y los vegetarianos suelen tener déficit de esta vitamina. Esta en los champiñones y el coco.
C: Frena la oxidación
Su nombre científico es «ácido ascórbico». Al ser soluble en agua, apenas se acumula en el organismo, por lo que es importante un aporte diario. Al igual que la vitamina E, tiene efectos antioxidantes y protege a la piel de las agresiones externas. Además, da luminosidad a la piel. Se encuentra en los vegetales frescos como el pimiento. Tambien en el kiwi y la guayaba.
D: Cosmético perfecto
Conocida también como «calciferol», resulta indispensable para la absorción del calcio y el fósforo. Todos tenemos vitamina D, se forma en la piel por la acción de los rayos ultravioleta.Las personas que trabajan de noche o que no se exponen al astro rey, presentan déficit de vitamina D, que es descalcificación o caries dental.Pescados, como las sardinas o el atún, son ricos en ella.
E: La de la juventud
También llamada «tocoferol». Debido a su gran capacidad para atrapar el oxígeno, actúa como antioxidante en las células frente a los radicales libres. Se la conoce como la «vitamina de la juventud» , aporta elasticidad y previene las arrugas. Puede ocasionar anemiao envejecimiento prematuro. Se encuentra en frutos secos.
¿qué detiene sus efectos?
Las bebidas alcohólicas. El alcohol aporta calorías sin apenas contenido vitamínico, a la vez que disminuye el apetito; al ingerir menos alimentos se producen carencias principalmente de ácido fólico y de vitaminas del grupo B.
El tabaco. La vitamina C interviene en los procesos de desintoxicación, reaccionando contra las toxinas del tabaco. Debido a ese gasto extra, en fumadores se recomienda un aporte de vitamina C doble o triple del normal.
