Si hubiera que hacer un ranking de los divorcios caros éste estaría encabezado por el del magnate ruso Roman Abramovich y su mujer, Irina.
Ella aceptó percibir “sólo 300 millones de dólares” por su divorcio, menos de la sexta parte de su fortuna, según el diario ruso Vedomosti.
Dos fuentes “del círculo de Abramovich” que requirieron el anonimato confirmaron esta cifra que, según el diario económico ruso, no incluye la ayuda financiera prometida a los cinco hijos del matrimonio por el ex magnate del petróleo, cuya fortuna asciende a 14 mil 200 millones de euros.
La pareja se divorció en febrero en la recóndita región rusa de Shukotka, de la que Abramovitch es gobernador, indican también las mismas fuentes.
Cuando Roman e Irina se conocieron él no tenía ingresos y la pareja se mantenía con el sueldo de azafata de ella.
La información del divorcio de los Abramovich ha trascendido, parcialmente, una vez cerrado el acuerdo pues la pareja ha procurado mantenerlo en secreto en todo momento. Según la revista ‘Forbes’ Roman es el decimosexto hombre más rico del mundo. La razón de la ruptura de la pareja, que tiene cinco hijos en común, podría ser la infidelidad de Romana a quien se le relaciona con la bella Daria Zhukova.
La joven, de origen ruso pero afincada en Londres, tiene 24 y antes de mantener un romance con Abramovich estuvo relacionada con el tenista Safin.
La negociación del divorcio se ha llevado en el más absoluto secreto y eso que la ruptura matrimonial entre Abramovich e Irina estaba más que cantada desde hacía meses.
Intentando evitar que la atención se centrara en ellos, el pasado octubre se apresuraron a desmentir a través de un comunicado que estuvieran separados y en proceso de divorcio.
Y todo para proteger unas negociaciones que han debido de ser de lo más arduas y que podrían haber dado lugar al divorcio más caro del mundo.
Más caro
Llegar a un acuerdo no ha tenido que ser fácil. No en vano, Abramovich no tenía ni siquiera trabajo cuando conoció, hace 15 años, a Irina. Ella estaba empleada como azafata en la aerolínea Aeroflot y fue la encargada de mantener a la familia en los primeros años. La situación ha cambiado tanto que ahora él ocupa el puesto número 16 en la lista de las mayores fortunas del mundo que cada año publica la revista Forbes.
La fortuna de Abramovich se ha estimado por Forbes en más de 16 mil millones de euros y su esposa, Irina, podría haber obtenido la mitad. Ellos han optado por no aclarar cuales han sido las bases de la ruptura. A día de hoy, la máxima cantidad obtenida en un divorcio ha sido de 1.000 millones de euros por lo que este divorcio podría multiplicar con creces esa cifra e Irina podría haber conseguido la escalofriante cantidad de más de 8.000 millones de euros.
Un día antes de que se hiciera público que ya estaba divorciado, Abramovich era visto en París junto a Daria Zhukova. Daria, de 24 años, es hija de un amigo del empresario, también es rusa y fue novia del tenista Safin.
La bella joven vive habitualmente en Londres aunque el pasado octubre –cuando salieron las primeras informaciones sobre el posible divorcio- abandonó el Master que estudiaba y puso rumbo a Moscú.
La relación no se ha roto como demuestra el hecho de que pasaran unos días juntos en la capital del Sena.
Amigos del matrimonio, en cambio, aseguran que la crisis entre los Romanovich es anterior a la aparición en la vida de Roman de Daria.
Ella
Irina se ha frustrado por su devoción a los negocios y al fútbol y ahora se tiene que contener por su cercana relación con otra mujer.
Hay más en la crisis que la relación con Daria.
El
En el 2006, Abramovich desmintió a través de un portavoz que su matrimonio haya entrado en una crisis irrevocable y que ellos hayan iniciado un proceso de divorcio.
