Al príncipe Harry no le importa estar a pocos días de ir al campo de batalla, pero sí divertirse y hasta darse el lujo de no atender el llamado de la reina Isabel, su abuela.
Ante su más reciente escapada, el joven fue sorprendido besando a su novia Chelsy Davy durante un partido de la copa del mundo de críquet entre las selecciones de Inglaterra y Australia.
El encuentro se celebró en el estadio Sir Vivian Richards de Saint Peters, en la isla de Antigua.
En las imágenes, Harry, que celebra unos días de vacaciones antes de incorporarse al ejército para ir destinado a Irak, se muestra cariñoso con su pareja en la última fila de una de las gradas y convencido seguramente de encontrarse a salvo de los fotógrafos.
El irreverente
En vísperas de su despliegue como soldado y antes de asumir el papel de “combatiente”, Harry, quien no se molesta demasiado en disimular cuánto le gusta vivir la vida, decidió no andarse por las ramas y cambió la tradicional y lluviosa reunión de Pascua de su abuela, la reina, por unos días de amor y lujo bajo el sol junto a Chelsy.
Un lugar idílico para olvidarse del mundo, aunque, como sucedió en esta ocasión, Harry no lo consiguió del todo, pues fue durante su estancia en la isla cuando recibió la triste noticia de la muerte de una amiga de su hermano, el príncipe Guillermo.
Según Dai Davies, antiguo jefe del equipo de seguridad del príncipe, se gastan absurdas cantidades de dinero para garantizar su seguridad las 24 horas
Será sancionado
El ejército británico llamará la atención al príncipe Harry de Inglaterra por las juergas nocturnas de alcohol que el joven protagoniza en locales de Londres un mes antes de viajar a Irak para combatir junto a las tropas de su país.
Esta reprimenda, que anunció el vespertino británico Evening Standard, se producirá después de que, de nuevo, el príncipe fuera fotografiado el pasado fin de semana con signos de haber tomado alcohol, algo que se repite con cierta frecuencia y que recogen puntualmente los medios de comunicación del Reino Unido.
“Harry no se está comportando como corresponde a un miembro de la familia real y no digamos ya como un oficial del ejército”.
