Unas mil fanáticas, en su mayoría adolescentes, aguardaron pacientemente durante horas el martes en una disquería para obtener un autógrafo del cantante Ricky Martin, que llegó a Argentina para promocionar su último disco “Ricky Martin MTV Unplugged”.
Un coro de gritos desesperados y flashes de cámaras de fotos acompañó el arribo del artista al local de la cadena Musimundo convulsionado por la presencia de cientos de seguidoras, que a duras penas lograban controlar numerosos policías y personal de seguridad privada.
Hasta el propio cantante se sorprendió de la multitud que lo esperaba y obligó a interrumpir el tránsito de una de las principales avenidas de la ciudad.
Encuentro con su ídolo
“Estoy muy feliz. La gente siempre me brinda su cálido aplauso. Argentina siempre me abrió sus brazos”, dijo Martin en un breve contacto con periodistas.
Muchas jóvenes sufrieron desmayos ante la emoción de ver al cantante puertorriqueño.
Como recién en marzo brindara una serie de conciertos, las seguidoras no quisieron dejar pasar la oportunidad de encontrarse con su ídolo para un autógrafo o conformarse con captar su imagen con cámaras digitales o teléfonos celulares.
Daniela Valentini, de 14 años, contó a AP que desde muy temprano llegó a la disquería porque “lo quiero ver, es lo único que quiero. No me perdí nunca ningún recital. Tengo todos sus discos”.
La presencia de más de un millar de jóvenes superó a los organizadores del evento, que optaron por permitir el ingreso a sólo 200 de ellas, previa compra del disco.
Vestido con una camiseta negra y un gorro de lana, Martin rubricó su firma durante más de una hora en tapas de discos compactos y en fotos que le acercaban las jóvenes.
Martin cantó el lunes por la noche en el programa “Showmatch”.
El cantante también concedió entrevistas a medios gráficos, radiales y televisivos.
Furor
Miles de fans acompañaron al artista en su presentación.
