La comedia romántica A Family Affair, protagonizada por Nicole Kidman, Zac Efron y Joey King, ya está en la plataforma Netflix.
Con una premisa similar a The Idea of You, cinta estrenada hace unas semanas en Prime Video, en la que Anne Hathaway se enamora de un cantante más joven que ella, Netflix estrena esta comedia, también con un tono ligero, aunque aquella se siente más genuina que esta, aunque Kidman y Efron le dan peso al elenco.
En A Family Affair, Zara (Joey King) es la asistente del actor Chris Cole (Zac Efron), con quien tiene una relación de amor-odio. Él es un desastre: inseguro, desorganizado y narcisista, mientras que ella es quien le arregla la vida, a la espera de una promoción que no parece llegar. Sin embargo, las cosas se complican más cuando Chris conoce a la mamá de Zara, Brooke (Nicole Kidman), una escritora viuda con inseguridades propias, pero con quien siente una atracción inmediata. En la historia, Brooke es 20 años mayor que Chris.
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Una regla básica de cualquier romance es que exista química entre los protagonistas. Desafortunadamente, el idilio nunca logra despegar porque los personajes de Kidman y Efron no son creíbles en ningún nivel: ni pasional, ni intelectual, ni sentimentalmente.
Cuando se conocen, nos quieren vender un magnetismo sexual que en realidad no existe; y cuando nos movemos a una cena íntima, nos quieren vender una conexión profunda arraigada en la pérdida, pero que se siente muy forzada.
Más interesante y divertida es la odisea de Zara, con una Joey King que logra elevar un papel que podría haberse quedado en el berrinche, pero al que le da más matices mientras trata de aceptar esa relación, convive con su abuela (la gran Kathy Bates) y persigue sus propios sueños. Es un marcado contraste con la rigidez de Efron.
El director es Richard LaGravenese tiene una carrera mucho más destacada como guionista que detrás de las cámaras, y esta película no elevará su perfil.
Pero si uno quiere desconectarse y simplemente pasar un rato viendo a actores atractivos complicarse la vida, podría haber cosas peores.
Reseña publicada en Agencia Reforma