Con un aumento de 50 lempiras al quintal de maíz se cerró ayer la negociación de compra y venta del grano entre productores y agroindustriales.
El precio quedó establecido en 250 lempiras a las empresas que producen subderivados de maíz para el consumo humano y 220 lempiras para la elaboración de concentrado animal.
La negociación se realizó entre los representantes de productores y organizaciones campesinas con la industria de harinas del país, como parte de una renovación de convenios entre estos sectores, coordinados por la Secretaría de Agricultura y Ganadería, SAG.
Según este acuerdo, la industria de harinas del país se compromete a comprar a los productores 360 mil quintales de maíz blanco: 330 mil por parte de la empresa Demahsa y 30 mil por la empresa Bachosa.
La relación de compra del grano por empresas será de un 50 por ciento para la zona centro-oriental y un 50 por ciento para la zona noroccidental.
La negociación indica que los centros de compra de la empresa Demahsa operarán en Choloma y Tegucigalpa, mientras que Bachosa lo tendrá en Choloma, pero siempre cumpliendo con su compromiso de comprar el 50 por ciento de su cuota en la zona centro-oriental.
Además, se estableció que la relación de compra-importación será de un quintal de maíz blanco comprado a nivel nacional por tres quintales importados de maíz.
La agroindustria podrá realizar sus importaciones de maíz blanco en el tiempo que lo deseen y gozando del arancel preferencial al cero por ciento.
Las importaciones durante octubre y noviembre serán aprobadas por la mesa de negociaciones y se indicó que todas las importaciones se harán con base en el dictamen de la firma contralora en consulta con la SAG.
Luis Donaire, miembro de Prograno, dijo que estos precios son buenos para el sector productor y que no esperan que los subproductos aumenten su precio, porque ésta es una negociación anual y la agroindustria firma compromisos.
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Las partes involucradas en los nuevos convenios autorizaron a las empresas de harinas, para importar durante el ciclo 2008, un total de 29 mil toneladas de maíz blanco como parte de su derecho adquirido.
