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El viaje proporciona una ocasión de ensanchar los cinco sentidos: oler y oír más vivamente, mirar y ver más intensamente, saborear o tocar con más atención: el cuerpo estremecido, en tensión y dispuesto a nuevas experiencias, registra más datos que de costumbre (...). Estas acertadas palabras del filósofo y escritor Michel Onfray adquieren todo el sentido cuando uno llega al Hotel Villa Verde, situado en la falda del Parque Nacional Celaque.
Al llegar y durante tu estadía escuchará las guacamayas, observará los colibrís entre otras aves que anidan en la montaña Celaque, apreciará la especie de liquidámbar, en esta zona también se encuentran los escarabajos azules, el cálido clima hace que se relaje y disfrute caminar por los senderos que tiene el hotel. No solo encontramos la predisposición a una mayor percepción, sino que aquí parece que los sentidos se multiplican e incluso actúan casi de manera independiente a nuestra voluntad.
En su ingreso podrá apreciar muralismo, resaltan las mujeres lencas, rostros de hombres, Iglesia, granos de café, maíz, entre otros detalles, son tres murales que se aprecian en las paredes exteriores del hotel, han sido pintados por el artista Luís Vásquez, originario de Choluteca, quien ha participado en tres Festivales de Gracias Convoca. En otra área del hotel se aprecia una estela maya.
Villa Verde dispone de 23 amplias habitaciones, distribuidas en las categorías: sencillas, dobles, triples. Como servicios adicionales, establecimiento, y un salón para eventos.
“Aquí puede apreciar los mejores amaneceres, caminar entre pinos, respirar aire puro y disfrutar de la naturaleza”, expresó Mariela Espinoza, Gerente General del Hotel Villa Verde.
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