Tegucigalpa. Los compradores de gas licuado tendrán que pagar L55.7 millones adicionales en caso que el Gobierno defina reconocer el margen al importador de las dos trasnacionales que comercian el citado combustible en el país.
Las denominadas “gaseras”, como se les denomina a las importadoras -- Grupo Tomza y Texaco --, están pidiendo a la Comisión Administradora del Petróleo que se les reconozca el margen al importador, que es de 5.31 centavos de dólar por galón (1.10 lempiras), ya que los demás carburantes de consumo interno reciben este beneficio en el Sistema de Precios Paridad de Importación.
De aplicarse este ajuste, se encarecería el cilindro de gas en L6.50 sobre el precio actual.
Las empresas justifican su petición en que la importación les genera pérdidas económicas al no reconocérseles el margen, a lo que agregan el encarecimiento de este derivado del petróleo en el mercado internacional por la elevada demanda de la Unión Europea y Asia.
La Fórmula de Precios de Paridad de Importación (PPI) sí reconoce el margen al distribuidor a las dos compañías citadas anteriormente, que es de 0.2269 centavos de dólar por galón (4.70 lempiras). Por cada cilindro de 25 libras ese costo es de 18.24 lempiras, que se carga al consumidor final.