18/12/2025
12:22 AM

Baja construcción no afecta al sector ferretero

nacieron en diferentes épocas, en pequeños locales, con poco personal y bajos recursos, pero la visión de sus propietarios los ha convertido en ambiciosos proyectos.

El volumen de ventas que manejan en la actualidad es para ellos un tema tabú, a menos que el competidor más cercano lo dé a conocer primero. Cuestión de estrategia, coinciden todos.

Se trata de la industria ferretera que crece a nivel nacional, a pesar de la caída que ha vivido el sector de la construcción en los últimos años.

El tamaño del mercado es un tema desconocido hasta por ellos. La falta de cifras oficiales de los actores del sector impide determinar cuánto manejan.

Según Silvio Larios, director ejecutivo de la Cámara de la Industria de la Construcción (Chico), existen unas 80 empresas en Tegucigalpa y 70 en San Pedro Sula. “No hay registros del número de negocios a nivel nacional, aunque se sabe que hay decenas de negocios pequeños que se dedican a esta actividad”, apuntó.

Pero es clara la presencia de grandes empresas que marcan la actividad comercial. Empresas que han avanzado al estilo de tiendas por departamentos para atraer más clientela. “Esa es una tendencia para mejorar ventas”, reconoció el directivo de la Chico.

Grandes firmas

Empresas como Larach & Compañía, Imferra, Ferretería Monterroso, Indufesa Doit Center, La Mundial, Alfesa, Feyco, entre otras, destacan y compiten agresivamente en el mercado.

Larach & Cía nace en Tegucigalpa en 1948 como una sucursal de Jorge J. Larach & Cía. Emilio Larach asume la gerencia general en 1955 hasta la fecha.

En 1977 expande su capacidad de servicio al inaugurar la segunda tienda en Miramontes. En 1991 abre su tercera tienda en Torocagua. En el 2003 inaugura su moderna tienda Mega Larach en la colonia Prado, recientemente incursionaron en San Pedro Sula y actualmente construyen una Mega Larach en el anillo periférico.

“Al principio estábamos en el centro de Tegucigalpa, en un local pequeño que le alquilábamos al señor Jorge Facusse y de ahí se construyó el edificio del centro. Después se abrió la tienda #2 y luego la de Torocagua y seguimos creciendo”, señala don Emilio Larach.

Un camino similar ha seguido Ferretería Monterroso, que inició en 1982, por Rolando Monterroso hijo, quien trabajaba junto con su hermano Omar Monterroso en San Pedro Sula.

Con financiamiento familiar comenzaron a vender poco a poco materiales desde su casa de residencia, donde permanecieron operando unos meses hasta que lograron alquilar un local pequeño, cerca de donde se encuentran actualmente las oficinas principales. La empresa fue creciendo con el paso del tiempo.

Actualmente tiene un inventario de más de 30 mil artículos para la venta y su nueva estrategia son las ventas por Internet.

Otra empresa sampedrana es el Grupo Imferra, que comenzó en los años 70 como una ferretería que se especializa en herramientas manuales y eléctricas para todas las industrias de Honduras.

Ferretería La Mundial, Alfesa y Feyco son otras empresas de San Pedro Sula que tienen una larga trayectoria y buscan la expansión de sus operaciones.

Y es que el sector ferretero ha echado mano de la innovación para atraer más clientela.

Pasaron de ser locales dedicados exclusivamente a la venta de materiales de construcción para abrirse a la venta de otros productos, como útiles escolares, juguetes y jardinería. Además de ofrecer el servicio online en sus ventas.

Introdujeron además el concepto de “hágalo usted mismo”, que permite al cliente llegar hasta las góndolas, buscar el producto, examinarlos y llevarlo con sus propias manos a caja para su cancelación, como parte de la alta competitividad que existe en el mercado, dice el gerente de mercadeo y ventas de Indufesa Do It Center, Carlos Aguilar.

Parte de esa competitividad ha llevado a las empresas a explorar nuevos mercados. Así, empresas que por años se concentraron en el mercado de San Pedro Sula, decidieron venir a instalarse a Tegucigalpa, y las de Tegucigalpa ir en busca de nueva clientela a San Pedro Sula. Indufesa Doit Center aperturó en 2011 en San Pedro Sula.

Esta ferretería nació el 4 de noviembre de 1985. Su primera tienda, en un pequeño local en la cuarta avenida de Comayagüela, abrió sus puertas como un local de pinturas que comercializaba principalmente productos Sherwin Williams. Con el paso del tiempo, la oferta de productos aumentó con otras líneas de ferretería, fontanería, electricidad y herramientas.

Un nuevo competidor en Tegucigalpa

La ferretería La Mundial, con amplia presencia hasta ahora en el mercado noroccidental del país, ha levantado un plantel de 3,000 metros de construcción solamente en tienda a inmediaciones del aeropuerto Toncontín, en el sector sur de la capital hondureña, donde también funcionará su centro de distribución.

Es la tienda número ocho a nivel nacional y el segundo plantel de distribución, en el que ofertarán un stock arriba de 35,000 artículos divididos en 16 departamentos, desde automotriz hasta pintura, pasando por jardinería, juguetes y artículos para el hogar.

La portavoz de la compañía, Karla Rivas, calificó a Tegucigalpa como “un mercado muy activo, dinámico y a la vez complejo; un mercado competitivo y en bastante crecimiento”. Al igual que otras empresas, “le apostamos a este mercado capitalino porque creemos que es un mercado fuerte, que genera bastante expectativa para invertir”.

Expuso que la estrategia para seducir el competitivo mercado se basará en precios bajos, calidad en productos, comodidad de la tienda y la asesoría en las compras.

Rivas dijo que desde su empresa se respeta mucho la competencia. Para los ejecutivos de Doit Center, La Mundial es una empresa cuyo fuerte ha sido la zona norte en cuanto a tiendas.

“Ellos están queriendo experimentar por la misma situación que vive el país, tienen que buscar nuevos horizontes y es lo que nosotros también buscamos cuando aperturamos la tienda en San Pedro Sula”.

“Y es que antes estaba bien marcado el mercado. La Mundial, Imferra y otros se consideraban ferreterías de la zona norte y ahora lo que sucede es que los de Tegucigalpa vamos a San Pedro Sula y los de San Pedro Sula vienen acá.

Eso es parte de la competitividad y es bueno que exista, porque nos va a exigir mejor calidad, mejores productos para poder hacer la diferencia en el mercado”.