John Pitti es un hombre de 37 años que trabaja para cumplir todos sus sueños. Licenciado en Educación Física y nativo de la provincia de Chiriquí (oeste de Panamá) ingresó al arbitraje hace 13 años, aunque no fue sino a partir de 2012 que recibió el gafete de la Fifa.
Entró a este ámbito “con los ojos cerrados”, seducido por la curiosidad; pronto, la pasión lo envolvió por completo. En la actualidad, Pitti invierte casi dos horas diarias en su entrenamiento para mantenerse en vigencia no solo en el torneo panameño, sino a nivel internacional (suma más de 30 presentaciones).
Es el mismo árbitro que el martes anterior pitó el Honduras-Sudáfrica (1-1). Era su primera vez en suelo catracho y no será la última porque Concacaf lo designó para ser el juez del juego contra México, sí, ese mismo del próximo 17 de noviembre en el Olímpico por las eliminatorias rumbo a Rusia 2018.
¿A qué se dedica?
En Panamá trabajo como profesor de Educación Física en una básica general en el Centro Lajero Arriba.
¿Dónde se preparó?
Estudié la licenciatura en la Universidad Autónoma de Chiriquí. Luego hice un profesorado en Educación Media en la Universidad Especializada de las Américas. Posteriormente gané una beca para estudiar Educación Física y Salud. Tuve la oportunidad de terminar el curso. Después empecé mis estudios como docente de posgrado y superior.
¿Hace cuánto está en el arbitraje?
Desde 2002. Como árbitro Fifa a partir de 2012.
¿Cómo surgió ese gusanito por entrar al arbitraje?
Diría que entré con los ojos cerrados. No tenía la visión de lo que era el arbitraje. Una vez entré y tuve la oportunidad de ver que es una carrera en la que puedes crecer, entonces cambió. Nunca fue fácil, ni ahora lo es. Ahora lo que tengo es una condición que debo mantener con desempeño.
¿Cómo se define como árbitro?
Como un árbitro en proceso de desarrollo, de grandes aspiraciones. Creo que hay que aspirar a cosas grandes, pero ir paso a paso. En el arbitraje no se pueden dar pasos agigantados. Si no tienes una buena base, un fundamento, es peligroso.
¿Cuál es su mayor aspiración?
Creo que la de todo árbitro es estar en un mundial. El que no tiene esas aspiraciones está siendo muy conforme.
Eso quiere decir que al igual que Honduras, El Salvador, México, usted también sueña con estar en Rusia 2018
Primero Dios.
¿Qué significa para un árbitro joven que le den el partido Honduras-México?
Más que honor, me quedo con ese gran compromiso. Es una responsabilidad. Me llevo el deseo de estar al 100% y más para ese partido. Estar bien preparado, en todos los aspectos: técnico, psicológico y físico.
¿Quiere que ese sea el partido de su vida?
Quizá no lo visualizo así, no restándole importancia, sino que creo que ese juego me puede dar otros de la misma magnitud.
¿Qué experiencia le dejó el partido de ayer?, ¿Honduras es un equipo manejable?
Todos los equipos son manejables siempre y cuando el árbitro haga un buen trabajo y sea justo en la aplicación de la ley de juego.
¿Cómo se va a preparar para ese compromiso?
Me preparo en mi provincia, donde trabajo. Acá es importante analizar estrategias de juego, jugadores. Individualmente, los dos equipos tienen jugadores muy buenos, rápidos y con mucha experiencia. Nada debe sorprendernos. Debemos estar preparados para cada acción, situación de juego, tomar las decisiones correctas basados en la regla y procedimiento.
¿Ha visto un partido Honduras-México?
Sí, creo que fue el que tuvieron para la última fecha clasificatoria a Brasil 2014.
¿Es un encuentro complicado o fácil?
La palabra fácil no existe en mi diccionario.
¿Qué espera del ambiente?
Para eso me voy a preparar. Insisto, el trabajo, desempeño, la aplicación de la justicia con base en la regla de juego.
¿Hasta ahora este se puede considerar como el partido más importante de su carrera?
Lógicamente, sí. El partido más importante para mí es el que sigue. Hubiese sido un partido de local o en la categoría Sub-17. El de anoche (martes) fue el más importante de mi vida.
Y salió bien librado...
Gracias a Dios, a mis asistentes, a los equipos, a la afición.
¿Qué árbitro es su espejo?
Todos los árbitros tienen una enseñanza para ti, solo tienes que detectarla y aprovecharla. El arbitraje a nivel mundial tiene mucha inspiración para mí.
Existe un término acá en el que dicen que Honduras y México son equipos colaboradores.
Respeto eso, pero yo no puedo esperar que los equipos me colaboren. Si me preparo con base en eso, estoy cediendo terreno como árbitro. Los jugadores en su afán de ganar, de su emoción, van a dar lo mejor de sí. Yo tengo otra meta y ahnelo. Diferente a la de ellos.