El estadio Yankel Rosenthal es una caldera mientras por el partido de vuelta de las semifinales del torneo Apertura 2023 entre Marathón y Motagua.
Los verdolagas corren con la desventaja de 2-1 tras el encuentro en Tegucigalpa y su afición tiene claro que para remontar y buscar la clasificación a la final del certamen ocupan de su apoyo.
Es por ello que desde la mañana de este sábado los seguidores del Monstruo Verde se desplazaron a diferentes puntos de venta de la boletería para no perderse este momento que puede ser lleno de alegría para ellos.
Ante esto se programó que la entrada los portones se abrirían a las 12:30 pm; sin embargo, hubo una excepción para Noé Garay y Francisco Garay, hijo y padre, que tienen el placer de decir que fueron los primeros aficionados en ingresar al Yankel Rosenthal.
La directiva de los verdes le permitió a estos señores entrar al recinto deportivo a las 11:40 am ya que don Francisco tiene un problema para caminar.
“Las sensaciones están a tope y esperamos que los aficionados respondan hoy como la mayoría de los aficionados de Marathón y venimos con toda la motivación para que el equipo pase a la final”, expresó Noé.
Y añadió: “Mi sangre es verde y al equipo futbolísticamente lo veo en bien, en Tegucigalpa tal vez le faltó estar fino a la hora de definir, pero estamos en nuestra casa y aquí Motagua la va a sentir. La verdad nos vemos finalistas”, comentó el señor de 44 años.
El seguidor de Marathón desde 1988 cree que su equipo ganará 2-0 con goles de Clayvin Zúniga y Kilmar Peña.
Por otra parte Francisco Garay tiene una enorme historia que contar pues él fue parte del plantel de aquel Platense que fue el primer campeón de Liga Nacional en 1965.
“No puedo comparar yo a los jugadores de antes con los de ahora porque es un fútbol distinto, pero teníamos un equipo muy completo para jugar hasta con rivales de Centroamérica. Éramos muy unidos titulares, suplentes, hasta directiva y hasta los aficionados”, recordó el ex delantero a quien le apodaban el ‘Toro’.
Garay más allá de ser parte de los primeros campeones de la Liga Nacional fue el goleador del segundo gol con el que vencieron 2-0 a Real España en el estadio Humberto Micheletti y lo narró con nostalgia.
“Me siento tan emocionado de contar esto. Faltaban dos minutos para terminar el partido y sale un tiro libre desde el centro del campo y el entrenador me dijo ‘Torooooo daleeee’ y eso me levantó el ánimo, el árbitro pitó, la pelota cayó en el área y yo con la punta del tacó le pegué y esa pelota se fue para arriba, pegó en el poste y entró. Después fue la locura en el estadio”.
Y complementó: “Mi madre estaba en el portón y cuando terminó el partido la viejita déjeme entrar, déjeme entrar, y con la emoción de la demás gente la botaron y me fueron a avisar. En la cacha me quitaron todo, la camisa, calzoneta, medias, tacos y le dije a mis compañeros que tal si no traigo nada hubiera quedado como Adán, jajaja”, finalizó el señor que tiene 78 años.
En el Platense de aquella época contaban con 34 jugadores de los cuales 30 ya fallecieron y don Francisco es de los sobrevivientes que aún puede contar esos momento de gloria para los porteños.
Cómo dato extra dirigió a Rolin Peña, vicepresidente de Marathón cuando jugaba fútbol en el Lempira de Hermacasa, don Francisco era el preparador físico del club y Alberto Chederani el entrenador
