Toni Kroos, centrocampista alemán del Real Madrid, ha causado revuelo en las últimas horas tras reconocer un error arbitral ante Bayern Múnich que le dio el pase a la final de la Champions League al cuadro blanco.
El defensor Matthijs de Ligt de los bávaros empató en la prolongación lo que era el 2-2 parcial del choque, pero segundos antes de su remate el árbitro Szymon Marciniak ya había hecho sonar su silbato después de que su asistente hubiese levantado el banderín por un polémico fuera de juego.
Ni asistente ni colegiado dejaron continuar una jugada que acabaría con el balón en la red de la portería de Lunin, aunque con los jugadores blancos y el propio portero ya parados tras escuchar el silbato.
La acción generó malestar en los alemanes y hoy Kroos reconoció que fue fallo y como consecuencia terminó favoreciendo a su equipo, al Real Madrid.
“Fue una mala decisión. Hay que dejar que el juego continúe y que la jugada acabe”, opinó Kroos en el podcast que dirige junto a su hermano Félix.
Y siguió agregando: “Creo que el error es principalmente del asistente”, señaló.
El volante merengue terminó dando su punto de vista sobre la acción y admitió que en el Bayern Múnich tuvieron motivos para reclamar de forma molesta.
“Porque si levanta la bandera, el árbitro entiende que lo ha visto claro y confía en que probablemente hubo un fuera de juego de tres metros. El enfado está justificado porque hay que afrontar la situación hasta el final, al 100%”, cerró diciendo.