A finales de la presente semana o al inicio de la próxima, la Fifa dará a conocer si existe el veto contra el estadio Azteca o realizará una nueva multa por los gritos homofóbicos que ocurrieron en el encuentro frente a Costa Rica en el partido eliminatorio del 24 de marzo.
Por lo tanto, la Federación Mexicana de Fútbol estaría tomando cartas en el asunto y con vistas al próximo encuentro frente a la Selección de Honduras, el próximo 7 de junio, válido por la quinta jornada de la hexagonal, harían el duelo fuera de la Ciudad de México.
Entre las alternativas que manejan los medios aztecas es que el partido frente a la Bicolor puede ser en Monterrey o en Querétaro.
Los estadios de los clubes Monterrey y Tigres, el BBVA Bancomer y el Universitario, respectivamente, son firmes candidatos por su gran capacidad para recibir aficionados y las directivas de los conjuntos se mostraron abiertos ante la posibilidad que podría convertirse en inminente en los próximos días.
La Corregidora, casa del club Gallos Blancos de Querétaro, es el otro escenario, con mejor posibilidad que los otros dos anteriores, pero que tiene el visto bueno para ser una opción considerable para que el Tri reciba a la Selección Nacional de Honduras en el partido que también marcará el final de la primera vuelta de la hexagonal de la Concacaf rumbo al Mundial de Rusia 2018.
El presidente de la Federación Mexicana es consciente que el veto puede hacerse oficial y no es un tema que los tomará por sorpresa.
“Si viene una sanción de veto al Tricolor la enfrentaremos”, señaló Decio de María, titular de la Federación Mexicana.
En el estadio donde juega sus partidos de local el Querétaro podría realizarse el encuentro ante Honduras.
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