En junio, un grupo consultivo de la Administración de Alimentos y Medicamentos recomendó que la próxima formulación de la vacuna contra la COVID se centrara en la variante ómicron XBB.1.5.
Aunque no se confirma por laboratorio la circulación de las subvariantes BQ.1 y BQ.1.1 en el país, los médicos indican que son las que están predominando en un 80% en el territorio.
Ayer, 8 de enero, la covid dejó de ser en China una enfermedad de categoría A, el nivel de máximo peligro y para cuya contención se exigen las medidas más severas, para convertirse en una de categoría B, que contempla un control más laxo, marcando así en la práctica el fin de la política de ‘cero covid’, retirada en diciembre por las autoridades después de que se produjesen protestas.
Esta cepa, del sublinaje de ómicron, es llamada “perro del infierno”. Médicos indican que las vacunas protegen contra estas nuevas mutaciones del virus.