“No queremos aumentar el número de partidos, queremos garantizar el descanso de los jugadores, que haya menos viajes, más partidos importantes y más oportunidades para que los futbolistas brillen, además de reducir la brecha entre los países que tienen más oportunidades y los que menos”, dijo Wenger, en la rueda de prensa posterior al encuentro que, durante dos días, han celebrado en Doha un grupo de exfutbolistas y técnicos que forman parte de la asesoría de la FIFA para el futuro del fútbol masculino.