Cuando el exceso de trabajo provoca conflictos

No pasar suficiente tiempo en casa y estar tan agotado que no tienes energía para dedicar a la relación de pareja, o entusiasmarte por hacer actividades en común, son cosas que lentamente pueden deteriorar cualquier relación de pareja.

El trabajo, que es una fuente de realización personal, de sustento personal o familiar, de pronto se convierte en un obstáculo para tener una mejor calidad de vida. ¿Qué hacer para que esto no deteriore una relación de pareja?

* Un aspecto fundamental es tener claras las prioridades. No perder de vista “lo urgente de lo importante”. Algunas personas piensan que trabajan para el bienestar de la familia, pero al mismo tiempo se dejan absorber por su actividad laboral al punto que descuidan el tiempo de calidad que los demás esperan.

* Preguntarse el lugar que ocupa el trabajo en nuestras vidas en relación a la pareja y la familia en general, es un autoexamen poderosísimo para tomar consciencia de qué cosas en particular podemos cambiar de nuestra actitud hacia lo que hacemos, cuando este está interfiriendo con las personas que amamos.

* No se trata de quitarle atención a nuestras actividades, en especial cuando hacemos algo que nos gusta y nos apasiona, sino que de ponerlo en su justa dimensión y evaluar cuánto peso tiene nuestro bienestar emocional sobre el trabajo.

* Es importante separar muy bien los espacios entre nuestro trabajo y el hogar. Cuando estamos con nuestra pareja, no ganamos nada con seguir pensando en las preocupaciones del trabajo y más aun si en ese preciso momento no podemos hacer nada.

* Cuando sea el momento de ocuparse de una situación en particular, entonces hay que actuar, pero no permitir que los problemas pasados o futuros, arruinen todo el día.

* Para remediar esto y que el trabajo no deteriore la relación de pareja, es recomendable examinar qué cosas podemos hacer para tener más tiempo, ser más productivos y en definitiva ser más felices con nuestro trabajo y que no se convierta en motivo de discusiones.

* En tus diálogos de pareja realiza preguntas abiertas. Si te sientes cansada o estresada, y no estás concentrada para mantener una conversación en ese momento puedes posponer la conversación hasta otro momento. Tu estado de ánimo influye en tu nivel de empatía.