La rebeldía y el romance se dan la mano en la propuesta primaveral de Coach, marca que apuesta por la diversidad y que con su reciente colección planea encantar a las jóvenes que en su vida diaria mezclan osadía y dulzura.
Una lente de lujo, la de Steven Meisel, inmortalizó la campaña, la cual fue realizada en Nueva York, ciudad cuna del fashion contemporáneo y también el punto de partida de Coach.
Firma emblema en productos de piel, indumentaria de moda y perfumes que guardan en un frasco el romanticismo concreto de aquellas que viven el amor sin empalagos, así se reflejan las siluetas en estas bellas imágenes, captadas desde el Liberty State Park: chicas que visten de flores y transparencias, aunque las combinan con chamarras de piel selladas con estoperoles.
Se trata de mujeres coquetas que, en una pradera y con los rascacielos de la Urbe de Hierro al fondo, se mueven en botas y zapatos de apariencia pesada, aire industrial y un toque ‘edgy’.
Con el cabello agitado por el suave viento de la Gran Manzana, juntas avanzan por la nueva ruta de la feminidad.
Los acentos en rosa no dejan de aparecer, mientras bolsas de piel con aplicaciones de flores sobrepuestas rematan en cadenas gruesas y flecos asociados con la indumentaria de tribus indias de Estados Unidos.
La combinación de estos polos opuestos llama mucho la atención, especialmente por el mensaje liberador que proyecta y que tanto gusta a las jóvenes de hoy en día. Además, accesorios contundentes, metálicos y roqueros, entre los que destacan brazaletes, bufandas y bolsos, hablan de un nuevo empoderamiento, exquisito en toda su rudeza.
Una lente de lujo, la de Steven Meisel, inmortalizó la campaña, la cual fue realizada en Nueva York, ciudad cuna del fashion contemporáneo y también el punto de partida de Coach.
Firma emblema en productos de piel, indumentaria de moda y perfumes que guardan en un frasco el romanticismo concreto de aquellas que viven el amor sin empalagos, así se reflejan las siluetas en estas bellas imágenes, captadas desde el Liberty State Park: chicas que visten de flores y transparencias, aunque las combinan con chamarras de piel selladas con estoperoles.
Se trata de mujeres coquetas que, en una pradera y con los rascacielos de la Urbe de Hierro al fondo, se mueven en botas y zapatos de apariencia pesada, aire industrial y un toque ‘edgy’.
Con el cabello agitado por el suave viento de la Gran Manzana, juntas avanzan por la nueva ruta de la feminidad.
Los acentos en rosa no dejan de aparecer, mientras bolsas de piel con aplicaciones de flores sobrepuestas rematan en cadenas gruesas y flecos asociados con la indumentaria de tribus indias de Estados Unidos.
La combinación de estos polos opuestos llama mucho la atención, especialmente por el mensaje liberador que proyecta y que tanto gusta a las jóvenes de hoy en día. Además, accesorios contundentes, metálicos y roqueros, entre los que destacan brazaletes, bufandas y bolsos, hablan de un nuevo empoderamiento, exquisito en toda su rudeza.
Debbie Álvarez, estilista profesional. Síguela en facebook: Dby Alvarez
|