Moda y belleza
La ciudad de la luz se convirtió una vez más en la capital de la alta costura con una nueva edición en la que se quiere demostrar que la “kaute couture” también viste a una mujer real.
El káiser Karl Lagerfeld ha convertido el Gran Palais en un teatro en ruinas como escenario para presentar la colección de Chanel. En la propuesta se mezcla la tradición con el futuro y las culturas se fusionan pero siempre bajo el sello de la maison. El tweed es el punto de unión.
Raf Simons, que firma su tercera colección para Dior ha subido a la pasarela unas propuestas dominadas por los colores, tejidos metalizados y volúmenes muy estructurados. Simons juega con estilos opuestos, desde propuestas vanguardistas hasta vestidos de noche de corte impecable y línea minimalista.
Giambattista Valli llena de luz el show con una colección delicada, romántica, floral y cargada de detalles. El diseñador italiano rinde homenaje a la porcelana mediante propuestas muy artesanales dominadas por los drapeados y grandes lazos. Las transparencias y flores envuelven de sensualidad a la mujer.
Más lujo
Bajo el título Nude, Giorgio Armani para su línea Privé presenta su colección inspirada en la época dorada de Hollywood. Los tonos rosados, nacarados y negros conforman la paleta cromática que tiñe a unas propuestas sofisticadas y muy femeninas que se ciñen a la cintura y realzan los hombros.
Versace volvió a subir a la pasarela a la top model Naomi Campbell. La firma mostró una colección muy entallada que se ciñe a las curvas y las envuelve en sensualidad. Las transparencias y el brillo se convierten en protagonistas y aliados para descubrir el cuerpo femenino.
El francés Stéphane Rolland ha presentado una muestra muy sofisticada y trabajada dominada por el monocolor. El negro, el azul noche y el blanco se han combinado con brillos y transparencias para aportar el toque de glamur a una colección de volúmenes arquitectónicos.
Inspirado
Jean Paul Gaultier ha puesto toque felino. El francés juega con prendas de cortes redondeados y trapecio para vestir a una mujer que no tiene miedo al exceso de ornamento. Detalles de inspiración oriental, brillo y estampados felinos.
Valentino, al son de Tubular Bells de Mike Oldfield, ha presentado una colección barroca llena de contrastes donde los lisos han compartido pasarela con las versiones más ornamentadas. Los looks barrocos con estampados inspirados en la naturaleza han puesto el contrapunto a los looks monocolor.
Viktor&Rolf fue muy conceptual con su creación dominada por el negro, único color y confeccionada en su totalidad por una seda tratada que adopta la apariencia del neopreno.
ELIE SAAB Vestidos lady con bolsillos en la falda para el coctel, vestidos de manga larga con falda hasta los pies y vestidos sin manga con escote en V y con falda larga predominan. La colección se desprende del tono nude y tinta su moda en perla, plata, azul oscuro, que reemplaza definitivamente al negro, verde noche y rojo intenso. Siempre en tejidos muy ricos, con falsas transparencias y juegos de bordados en cristal que forman paisajes estelares.
ZUHAIR MURAD El diseñador imaginó “el sueño de una joven transportada en un bosque glacial”, ofreciendo una colección en claro oscuro, con trajes en seda, encaje y tul, que reflejaban la luna o las ramas desnudas de un árbol, y capas en plumas de avestruz. El azul en distintas tonalidades se convierte en uno de los colores estrella de esta colección de alta costura. Las faldas son de línea sirena o acampanadas. En los escotes es donde se imprime una creatividad que presenta ‘mil y una formas’, aunque siempre apostando por la sensualidad gracias a cortes muy sugerentes o transparencias. Mediante bordados, Murad nos presenta un estampado que, en apariencia visual, bien podría simular las raíces de un árbol.
StephaNE ROLLAND El color negro domina la colección y se combina con el blanco. No obstante, las transparencias y los brillos, así como el patronaje muy elaborado, rompe la sobriedad que podría generar el uso de esta tonalidad casi en exclusiva.
ARMANI PRIVÉ la moda de los 20 sigue en plena actualidad. Giorgio Armani recupera colores, formas y tejidos para realizar una colección de lujo clásico, glamur excesivo y tintes cinematográficos. Destacan conjuntos de chaqueta y pantalón pijama.