Poseer una piel impoluta no es simplemente una cuestión de genética. Tus hábitos, buenos o malos, se verán reflejados, por defecto, en la apariencia y salud general de tu cutis.
Kathya Chinchilla, especialista en dermatología y dermatopatología, aclara que una rutina de cuidado facial puede ser tan compleja o tan sencilla como exijan las necesidades de cada piel.
Es simplemente un acto personalizado, pero que se resume en tres pasos básicos e imprescindibles: limpieza, hidratación y protección solar.
El objetivo de cualquier rutina es procurar la salud de la piel y, a su vez, solucionar “defectos” o enfocarse en zonas problemáticas. Eso sí, “a medida que la piel cambie (por edad o afecciones) o sus necesidades mutan, también lo harán los productos”, asegura Chinchilla.La limpieza es el santo grial del cuidado facial.
Lo ideal es decantarse por dermolimpiadores suaves, preferiblemente con un pH con tendencia a ser ácido y libre de álcalis. Están aquellos específicos para cutis grasos con tendencia a acné, secos, sensibles, atópicos, con rosácea e incluso para despigmentar.
De acuerdo con la experta consultada, este producto puede ser “enjuagado con agua, agua micelar, leches desmaquillantes, agua lipídica o desmaquillantes bifásicos.
¿La razón? Atrapan, eliminan, disuelven y retiran las impurezas de la piel.
“En promedio, el hondureño suele fallar en dos pasos básicos del cuidado facial: omiten tanto la limpieza facial diaria, o si lo hacen utilizan un jabón de tocador, y el uso de fotoprotectores. Otra de las grandes falencias es prescindir de la asesoría profesional certificada para tratar afecciones y la salud de la piel, cabello y uñas”.
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Otras recomendaciones
Limitaciones. En algunos tipos de piel como la piel seca o sensible, no es recomendable utilizar dermolimpiadores de enjuague dos veces al día. Por la mañana, lave el rostro únicamente con agua.
Hidratación. Este paso debe hacerse dos veces al día: por las mañanas después del baño y por la noche.Protección solarEste paso no es negociable. Se debe utilizar cada mañana y reaplicar cada tres horas.
Especificaciones. Si bien debe optar por un filtro arriba de FPS30, también decántese por los que protegen de rayos infrarrojos.