Dígale no a la rutina

Revalúe su situación y propóngase metas a nivel personal y familiar.

  • Actualizado: 30 jun 2013

Uno de los mayores enemigos en las parejas es la rutina, el dar por sentado que tiene ganado a su amado por el solo hecho de que son un matrimonio. ¿Le ha dicho a su pareja últimamente cuánto lo ama?

Las consecuencias dependen del grado de madurez y compromiso adquirido por la pareja. “Si la rutina se enfrenta mal, logra disminuir paulatinamente la magia de la vida en pareja hasta que solo queda eso: la rutina misma como definición vacía de la vida conyugal. Consecuentemente, el afecto y el apego se pierden y la familia como estructura base de si misma se desmorona desde sus cimientos.

Algunas señales de que su relación está siendo invadida por la rutina son las siguientes: La disminución de las muestras de afecto. La falta de interés en las actividades y sucesos del día entre ambos. El olvido de ocasiones especiales que antes se disfrutaban mucho en pareja. La falta de actividades recreativas de pareja y consecuentemente de familia. La disminución de la actividad sexual. Entre otros.

“La rutina no es algo que pueda eliminarse de la vida de la persona normal. Después de todo, las labores de un trabajo son rutinarias por naturaleza. Sin embargo, hacer aquello que nos gusta transforma esa rutina en algo placentero ¿Por qué no valorizar nuestro lado positivo y también el de nuestra pareja, reenamorarnos nuevamente de la persona que amamos y gozar de la estabilidad, seguridad y paz que genera una familia unida y llena de afecto, alegría y dinamismo?

Usted y su pareja pueden cambiar esa realidad, anímese a dar el primer paso.

Valore
Revaluar y revalorizar su compromiso. ¿Nos satisface esta relación? ¿Deseamos continuarla? La psicóloga afirma que enfoque que usamos para insertarla sana y positivamente en nuestras vidas es lo que hace la diferencia.

Equipo
Si las respuestas, a las preguntas anteriores, son positivas proponerse metas a corto, mediano y largo plazo que incluyan a su pareja generan actividades que refuercen los lazos de afecto y confianza entre la pareja y la familia.

Recordar
Revaluar los factores positivos que nos atrajeron a nuestra pareja en primer lugar. Enfocar los esfuerzos en dar variedad a las actividades que se puedan iniciar en conjunto y traigan nueva energía positiva el hogar.

Diversión
No están obligados a hacerlo todo juntos. Deje que tenga su noche de fútbol con amigos. Hay que darse libertad, si no se corre el riesgo de agobiarse el uno del otro. Esos momentos separados harán que se echen de menos.