El maquillaje es nuestro principal dolor de cabeza.El aire acondicionado, la luz artificial a todo lo que da inciden en que no dure el tiempo deseado.
Pero no te preocupes, siempre hay pequeñas formas de lucir guapísima durante toda tu jornada de trabajo. Sigue leyendo para conocer seis sencillos trucos que refrescarán tu look sin salir de la oficina.
1. Usa tus dedos para mojar un poco tu cabello. Sería imposible llevar todo nuestro arsenal al trabajo; sin embargo, si por la mañana aplicaste mousse o crema para peinar, con un poco de agua en tus manos podrás reactivar los productos. Masajea las raíces con los dedos para recuperar el volumen o usa las palmas para controlar esos cabellos atacados por el frizz.
2. No subestimes el poder del papel matificante. Un must en tu cosmetiquera es un paquete de papelitos de arroz o matificantes, aunque tu piel no sea grasosa. ¡Sirven para todo! Desde rebajar el color de tu lipstick o blush cuando aplicaste demasiado hasta quitar los terribles brillos de la zona T después de un largo día.
3. Carga un bálsamo labial con color. Aunque ya hayas perfeccionado el lipstick de colores, es muy probable que tus labios resientan los pigmentos. En lugar de aplicar una capa más de labial cuando sientas que están resecos, opta por una capa de bálsamo con color para hidratar.
4. Reaplica blush. La clave para lucir más despierta es el color rosado de tus mejillas. Si quieres lograr una apariencia con el menor esfuerzo, concéntrate en devolver la vida al rostro con un poco de rubor rosado. ¿No tienes uno a la mano? Usa un poco de tu labial y difumina superbien.
5. Bebe agua helada. Nada refresca más tu rostro que un poco de agua fría que active tu energía desde el interior. Un vaso de agua helada te hará sentir -y lucir- mucho más fresca.
6. Encrespa tus pestañas. El estar aplicando capas y capas de mascara a las pestañas sólo va a lograr que se hagan grumos. Mejor carga con un rizador y muy gentilmente dale un boost a tus pestañas.