Tegucigalpa, Honduras.
Se cumplen tres años, desde que individuos a bordo de tres vehículos interceptaron a las fiscales Marlene Banegas y Olga Patricia Eufragio en la colonia El Prado, de San Pedro Sula, un 10 de octubre del año 2014. Eran las 7:10 pm cuando la ráfaga de disparos se escuchó en la zona y alarmó a los vecinos. Decenas de casquillos se encontraron en la escena y de ellos más de 50 acabaron con la vida de Banegas, la fiscal que con su firmeza y transparencia, desde el año 2000, dio un ejemplo de su trabajo en el Ministerio Público.
Varias hipótesis se manejaron en este asesinato, lo que sí se determinó fue que el objetivo del ataque era Marlene Banegas, coordinadora de la Fiscalía de Delitos contra la Vida. A 36 meses de su muerte, lo único claro que se tiene es que en el proceso detuvieron a dos policías: Héctor Jacinto Mendoza Gonzales, alias Camuma, y Roberto Armando Carranza, alias Carranza, a quienes el Ministerio Público acusó por el delito de asociación ilícita por estar ligados a la mara Salvatrucha, MS-13. Y fue por ese delito que el 17 de agosto de este año se les condenó a una pena de 13 años de prisión.
El
Ministerio Público, en un comunicado, informó que la Fiscalía Especial de Delitos contra la Vida aseguró que presentó suficientes elementos probatorios contra los cabecillas de la MS: Alexander Mendoza, alias Porky, Jairo Orellana Recinos, alias Kawas y Dennis Adalid Paguada, Alias Pagua, por los asesinatos de las Fiscales.
Investigaciones
Es un caso complejo, donde varias hipótesis se conjugaron, la primera por el caso de la masacre en la zapatería, ocurrida en el 2010, en la colonia San Francisco en San Pedro Sula. Banegas, junto con otro fiscal llevaron el caso, la hipótesis tomó fuerza cuando durante el proceso sufrieron serias amenazas contra sus vidas.
Dos años después la detención de los policías determinó que tanto “Camuma” como “Carranza”, en ese momento activos dentro de la Policía, modificaron, entorpecieron y desviaron la escena del crimen de las fiscales para hacer creer a las autoridades que no fueron cabecillas de la MS-13 los que planificaron y cometieron el asesinato. Los expolicías implantaron evidencias, falsearon y modificaron informes investigativos. Ahora se espera que los jueces determinen la culpabilidad o no de los miembros de la MS que guardan prisión en El Pozo.
Se cumplen tres años, desde que individuos a bordo de tres vehículos interceptaron a las fiscales Marlene Banegas y Olga Patricia Eufragio en la colonia El Prado, de San Pedro Sula, un 10 de octubre del año 2014. Eran las 7:10 pm cuando la ráfaga de disparos se escuchó en la zona y alarmó a los vecinos. Decenas de casquillos se encontraron en la escena y de ellos más de 50 acabaron con la vida de Banegas, la fiscal que con su firmeza y transparencia, desde el año 2000, dio un ejemplo de su trabajo en el Ministerio Público.
Varias hipótesis se manejaron en este asesinato, lo que sí se determinó fue que el objetivo del ataque era Marlene Banegas, coordinadora de la Fiscalía de Delitos contra la Vida. A 36 meses de su muerte, lo único claro que se tiene es que en el proceso detuvieron a dos policías: Héctor Jacinto Mendoza Gonzales, alias Camuma, y Roberto Armando Carranza, alias Carranza, a quienes el Ministerio Público acusó por el delito de asociación ilícita por estar ligados a la mara Salvatrucha, MS-13. Y fue por ese delito que el 17 de agosto de este año se les condenó a una pena de 13 años de prisión.
| Marlene Banegas se desempeñaba como coordinadora de la Fiscalía Especial de Delitos contra la Vida.
|
Investigaciones
Es un caso complejo, donde varias hipótesis se conjugaron, la primera por el caso de la masacre en la zapatería, ocurrida en el 2010, en la colonia San Francisco en San Pedro Sula. Banegas, junto con otro fiscal llevaron el caso, la hipótesis tomó fuerza cuando durante el proceso sufrieron serias amenazas contra sus vidas.
 Olga Eufragio, estaba asignada a la Fiscalía de Medio Ambiente.
|
