Decepcionados y sin esperanza de recibir el dinero por el que han trabajado por más de un año, los guardias de seguridad del hospital Mario Rivas continuaron ayer en paro de labores.
Los vigilantes permanecieron en uno de los portones del centro asistencial en protesta porque les deben a unos 14 y a otros hasta 17 meses de sueldo.
Las puertas del Mario Rivas estaban ayer de par en par sin nadie supervisando las entrada y salidas de las personas.
El personal que labora en el hospital y los mismos pacientes se quejaron porque temen ser víctimas de la delincuencia en dichas instalaciones. Los empleados también denunciaron que hasta se puede extraer equipo porque no hay quien vigile.
“Habiendo seguridad ya se han denunciado asaltos a los enfermos, ahorita que no hay guardias se puede agudizar este problema”, expresó una enfermera que prefirió omitir su nombre. Dijo que cada vez que los guardias van a paro cierran las puertas de las salas de hospitalización porque se sienten inseguras, especialmente por la noche.