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Un concierto navideño de altura

  • 17 enero 2023 /

En 2014, el maestro de música Obed Timoteo Osorio Nolasco, con el respaldo del presidente de la Asociación de Padres de Familia del instituto Federico C. Canales de Jesús de Otoro, fundó la Orquesta de Viento del colegio con estudiantes de esa institución. Desde esa fecha, gracias al entusiasmo de los muchachos, del director, de los padres y de la comunidad, el conjunto musical avanzó en calidad a tal grado que logró el primer lugar a nivel nacional en el Concurso de Orquestas de Viento a nivel estudiantil integrado por muchachos y muchachas con entusiasmo por la música.

Debido al alto nivel de ejecución que han logrado estos chicos, con la conducción de Osorio Nolasco, se les ha pedido intervenir en casi todos los eventos que se realizan en el municipio; de esta manera han ejecutado para presidentes de la república, diplomáticos, misiones internacionales del Club de Leones, Cruz Roja, graduaciones de universidades, presentaciones de libros y actos cívicos.

Hace unos pocos años, Jesús Evelio Inestroza se tomó la tarea, junto con los entusiastas de Otoro, de remodelar el antiguo local de la escuela primaria Renovación, en la cual yo cursé mis estudios primarios. Al edificio le habían derribado la torre del reloj y se encontraba en total abandono. Los esfuerzos de Jesús Evelio y su grupo han hecho posible que el local esté casi totalmente rehabilitado con el respaldo técnico del Instituto Hondureño de Geografía e Historia. Falta poco para la inauguración como Casa de la Cultura.

Mientras lo reconstruían, Jesús Evelio se dio a la tarea de crear una escuela de enseñanza musical para niños, que bautizó con el nombre de uno de los hijos destacados del municipio, D. Camilo Rivera Guevara (21 de julio de 1878-1954), mi abuelo. D. Camilo inició sus estudios musicales en una escuela para niños que fundó el alcalde de Otoro, pero dado que la orquesta tocaba muy bien, el gobernador de Intibucá la trasladó manu militari a La Esperanza en donde brilló en los eventos sociales de esa ciudad. Posteriormente el abuelo fue alumno del maestro Manuel Adalid y Gamero y se destacó como filarmónico, maestro de música y compositor, desempeñándose en el magisterio musical en varios institutos, como director de bandas militares y como subdirector de la Banda de los Supremos Poderes.

La escuela de música Camilo Rivera Guevara se fundó el 31 de julio de 2019 con el respaldo entusiasta del maestro Obed Timoteo Osorio Nolasco, quien ofreció sus servicios voluntarios para impulsar el proyecto. La pandemia no dejó de afectar el avance de los niños provenientes de escuelas de Otoro, pero el entusiasmo de los promotores, del maestro Osorio Nolasco, de los niños y de los padres hizo que el proyecto no se detuviera. Los instrumentos, los atriles y el mobiliario fueron donados por la Fundación Cepudo gracias al entusiasmo de Antonio José Coello y Linda Coello, sin faltar el respaldo de la Municipalidad y de los padres.

Estos esfuerzos de la escuela infantil han dado sus primeros frutos: el pasado 7 de enero, los dos conjuntos musicales dieron su primer concierto navideño conjunto, con un programa organizado en tres partes: la primera con interpretaciones de la Orquesta del Instituto, luego los niños de la escuela Camilo Rivera Girón y por último un ensamble de los dos conjuntos musicales. Ambos dirigidos por el maestro Obed Timoteo Osorio Nolasco.

El salón estaba lleno y las actuaciones de los jóvenes y de los niños fueron ovacionadas con entusiasmo.

El programa contenía melodías tradicionales navideñas ejecutadas con maestría y con una severa interpretación que no denotó notas falsas. Los pequeños, por ser la primera vez enfrentados con el público, mostraron temor al inicio, pero muy pronto se dieron cuenta de que podían e hicieron un magnífico papel con las habilidades que se pueden esperar de sus cortas edades.

No queda más que felicitar a ambos conjuntos; a los jóvenes desearles muchos éxitos y pedirles que no abandonen la música y a los niños advertirles que tienen por delante un largo camino para perfeccionar sus habilidades, pero que el éxito, seguramente, les compensará sus esfuerzos. Muchos agradecimientos a Jesús Evelio y a Obed Timoteo por estas grandiosas iniciativas y gloria a D. Camilo Rivera Guevara.

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