El 14 de abril de 2023, un cohete Ariane-5 partió desde el puerto espacial de Kourou, en la Guayana Francesa, llevando a bordo al “Explorador de Lunas Heladas de Júpiter” (Juice, por sus siglas en inglés).
La misión Juice es una realidad gracias a la Agencia Espacial Europea (ESA) junto con otros socios como la Nasa, la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (Jaxa) y la Agencia Espacial de Israel (ISA).
El día y la hora del lanzamiento fueron cuidadosamente calculados para que la Tierra, la Luna y Venus estuvieran alineados y la sonda pueda realizar cuatro sobrevuelos que la acelerarán a la velocidad necesaria para partir hacia Júpiter.
Con un costo que ronda los USD 1,700 millones se espera que llegue a la órbita del mayor planeta del sistema solar en aproximadamente 8 años, en julio de 2031, después de recorrer 6,600 millones de kilómetros.
La misión, en la que científicos de la ESA llevan trabajando unos 15 años, tiene como objetivo estudiar tres de las lunas más grandes del planeta Júpiter: Calisto, Europa y Ganímedes.
Las lunas fueron descubiertas por el astrónomo italiano Galileo Galilei en 1610, utilizando el recién inventado telescopio. Se cree que estos mundos cubiertos de hielo albergan grandes reservas de agua líquida.
Sus diámetros oscilan entre 4,800 y 5,300 kilómetros, más grandes que nuestra luna, que tiene unos 3,500 kilómetros de diámetro. Esta es una de las misiones espaciales más ambiciosas lanzadas por Europa.
Juice realizará 21 sobrevuelos de la luna Calisto, dos de Europa y después se situará en la órbita de Ganímedes, durante nueve meses. La misión terminará en 2035, cuando la sonda se estrelle contra la superficie de esa luna.
Honduras se sitúa en la órbita de China y Rusia.